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Triunfo récord para Diablos los pone 2-0 arriba en Serie del Rey
Diablos Rojos del México destrozó 17-0 a Sultanes de Monterrey en el Juego 2 de la Serie del Rey 2024, un marcador que entró a los libros de historia y les da confianza para continuar la afrenta en el norte.
Los Diablos Rojos del México hicieron pasar un verdadero infierno a los Sultanes de Monterrey en el inicio de la Serie del Rey 2024.
Fueron dos días de explosión ofensiva para los Diablos en su casa, el estadio Alfredo Harp Helú de la Ciudad de México, para tomar ventaja de 2-0 por el título de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) 2024 antes de partir a Nuevo León para continuar con la batalla.
Ya en el Juego 1, los Diablos habían demostrado su arsenal al bat al imponerse por 14-6, pero el Juego 2 terminó por hundir a los Sultanes. El marcador fue de escándalo: 17-0, que de inmediato se colocó en los libros de historia de la LMB.
Y es que de acuerdo con información de la propia liga, la victoria de 17-0 que se suscitó este jueves en el Juego 2 es la diferencia más amplia de la historia en un juego de Serie Final o Serie del Rey y, además, es la blanqueada con marcador más abultado también en estas instancias.
Los registros de la Serie del Rey en las últimas dos décadas tenían como récord el 9-0 que impusieron los Tigres sobre los Acereros en la temporada 2015, en cuanto a blanqueada y triunfo con mayor diferencia. Los Diablos Rojos casi duplicaron ese marcador ante la radiante felicidad de sus más de 20,000 aficionados en el estadio Alfredo Harp.
La paliza del Juego 2 empezó a tomar forma desde la segunda entrada, con un jonrón de Arístides Aquino y poco después otro de Julián Ornelas. Sin embargo, la victoria tomó tintes de paliza en la quinta entrada, cuando los Diablos anotaron ocho carreras.
En la sexta entrada cayeron dos carreras más y en la séptima fueron otras tres, que sumando las cuatro de la segunda entrada dieron las 17 de la victoria. En total, la novena capitalina finalizó el marcador en hits con 18-3, siendo el pítcher ganador Érick Leal y el perdedor Tyler Viza.
Los Diablos Rojos también impusieron la tercera marca más alta de carreras anotadas en un partido de Serie del Rey desde la temporada 2005, ya que sólo se quedaron por detrás de las 21 de los Saraperos de Saltillo contra Pericos de Puebla en 2010 y de las 19 de Tigres (actualmente de Quintana Roo) contra los propios Saraperos en 2005.
Pero para el manager de Diablos Rojos, Lorenzo Bundy, estos dos resultados abultados en el inicio de la Serie del Rey no significan que el equipo pierda la seriedad en el objetivo de ganar el trofeo, algo que busca la institución desde 2014.
“El mensaje es que si ganamos 17-0 o 2-1 es lo mismo, ya estamos arriba 2-0 en juegos. Todavía no terminamos el trabajo, para ganar la Serie del Rey y ser campeón necesitas ganar cuatro juegos. Estamos a mitad de camino, pero todavía tenemos mucho trabajo por hacer. Jugar en Monterrey no va a ser fácil y no vamos a hacer 31 carreras en dos juegos, pero tenemos mucha confianza en nuestra gente, estoy muy contento de cómo estamos jugando”, analizó Bundy tras el Juego 2.
Habrá un día de descanso en la Serie del Rey este viernes mientras los equipos se preparan para encarar el Juego 3 el sábado en el estadio Mobil Super, casa de los Sultanes de Monterrey y donde, seguramente, habrá un fuerte apoyo para la novena regiomontana.
El Juego 4 será el domingo también en Monterrey, así que si Diablos Rojos logra mantener su inercia y ganar los siguientes dos partidos, estará festejando su primer título de LMB desde 2014 y el 17 de su historia en territorio ajeno.
En caso de que Sultanes gane al menos uno de los partidos de este fin de semana, la Serie del Rey se mantendrá en Monterrey hasta el Juego 5, programado para el lunes 9 de septiembre. Si la contienda se extiende al Juego 6, volverá a la Ciudad de México para el miércoles 11 en otra cita dentro del estadio Alfredo Harp Helú.