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Atender demanda de vivienda con visión municipal, necesario para reducir la brecha habitacional
Planificación urbana, atender el financiamiento y municipalizar, las acciones que propone el MIT para ampliar el acceso habitacional en México
Para combatir el rezago habitacional en México, el gobierno debe impulsar políticas públicas que establezcan la municipalización de la vivienda, a través del financiamiento y subsidios distribuidos de manera regional, según el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
En alianza con la proptech La Haus, el instituto compartió la segunda y última parte del estudio “Reflexiones en torno a la evolución del mercado de la vivienda: sueños y realidades”, con el objetivo de trazar los ejes clave para ampliar el acceso a la propiedad habitacional.
En el 2022, Albert Saiz, profesor asociado en los programas de planeación urbana y bienes raíces en el MIT, encontró que México tiene una brecha de casi 16 millones de viviendas, la cual deberá ser cubierta los próximos 20 años.
De esta forma, el país tendría que desarrollar al menos 800,000 casas nuevas al año, por lo que durante las próximas dos décadas se debería destinar un promedio de 3.87% del PIB nacional en construcción habitacional.
Sin embargo, la inversión y el desarrollo de inventario nuevo no son una solución aislada para abatir el rezago habitacional en México. De acuerdo con el MIT, esto debe ir acompañado de financiamiento y subsidios en las regiones más rezagadas.
Saiz afirmó que de no darse lo que denomina “municipalización de la vivienda”, la mayoría de los apoyos se destinarán a ciudades con mayor demanda, sin reflexionar qué y cómo impulsarán el acceso a la vivienda y el crecimiento de la oferta.
“Los beneficios de una municipalización también impactan en soluciones como los créditos, los cuales requieren un análisis de necesidades de los diversos contextos de México. En paralelo, tener una planificación urbana con visión municipal permitiría crear oferta que responda a las necesidades de su demanda”, agregó el profesor.
De esta forma, insistió en que el gobierno debe establecer bases que impulsen una mayor participación de los líderes de los (2,446) municipios, ya que “México es un país grande y diverso social y económicamente, por lo que es complejo hacer funcionar una única política nacional de vivienda”.
“El gran objetivo de la municipalización de la oferta de vivienda es poder crear programas locales que detonen soluciones innovadoras a la medida”, subrayó el experto.
Sistema financiero
Uno de los principales retos a solucionar para el acceso a vivienda es el financiamiento, específicamente el crédito hipotecario. El MIT resaltó que este debe integrar a la gran base trabajadora informal mexicana para que puedan comenzar la creación de su patrimonio.
Al respecto, Saiz comentó que la mejor manera de atender esta necesidad es con innovación tecnológica en soluciones que brinden registros de información. Por ejemplo, es importante utilizar herramientas para registrar el pago de rentas, lo cual permitiría brindar data de la capacidad de pago del sector informal.
Además, el académico acotó que empresas como las fintech podrían generar nuevas y mejores soluciones para dar acceso a financiamiento en mejores condiciones tanto a personas que pueden utilizar productos de la banca, como aquellos que se encuentran desatendidos por ella.
Soluciones con visión social
La única forma de cambiar la situación inmobiliaria en México, concluye el estudio, es a través de múltiples soluciones que tengan visión social.
En este sentido, Saiz compartió que existen acciones que sumarían a la industria de la vivienda del país, como incluir a la sociedad civil en la toma de decisiones y atender a las zonas más rezagadas.
“México tiene una gran oportunidad para impulsar el acceso inmobiliario, pero no lo logrará si el trabajo se mantiene sólo concentrado en el gobierno y menos si la visión atiende al crecimiento de aumento de demanda de las grandes ciudades, es decir no puede sólo ver a Ciudad de México o Nuevo León, necesitamos, incluso dentro de estas urbes, entender qué requieren al interior y comenzar a generar soluciones”, concluyó el académico.