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Telefónica, Kimberly y PepsiCo, damnificadas por tasa de cambio
Empresas extranjeras han tenido que hacer reajustes para competir en un mercado que no les está dando garantías. Algunas firmas incluso temen que la incertidumbre macroeconómica les impida repatriar sus capitales.
Ante la nueva tasa de cambio que Venezuela impuso para combatir la devaluación y la escasez de divisas, las empresas instaladas en ese país están sobreviviendo a las pérdidas que registran en Ebitda, utilidades y exceso de bolívares en el flujo de caja.
Según un informe de la agencia Reuters, casos como el de PepsiCo, que hizo una revalorización de sus activos y disminuyeron en 105 millones de dólares; Kimberly Clark, que los redujo en 462 millones de dólares, o uno de los más críticos que fue el de Telefónica, con reajustes en sus activos por 3,230 millones de dólares, son algunos de los que han salido a relucir ante la opinión pública y tienen prendidas las alarmas sobre una posible desinversión en Venezuela.
A éstos se sumarían las empresas colombianas instaladas en ese país.
La lista, según Víctor Maldonado, director de la Cámara de Comercio de Caracas, asciende a 100 compañías colombianas que están haciendo sus ajustes para lidiar con las nuevas imposiciones del gobierno venezolano.
Aproximadamente unas 100 empresas, todas importantes, nos han hecho saber esta preocupación, que no se respetan los derechos de propiedad y que no hay la posibilidad de repatriar capitales , dijo Maldonado.
Algunas de ellas, sin ser confirmadas por Maldonado, pero que por registro de la Cámara de Integración Económica Venezolano Colombiana están presentes en Venezuela, son Avianca, Carvajal, Noel (Grupo Nutresa), Colombina, Legis, Alpina, Santillana, Genfar, Chaid Neme y Vivax Pharmaceutical.
La nueva tasa Simadi, que convierte los 6.3 bolívares por dólar a una flotación libre que llega a alcanzar los 174 bolívares, ha sido utilizada por las empresas para rehacer sus cálculos en capital y flujos de caja para conocer con cuántos bolívares cuentan. La escasez de dólares en el mercado interno de Venezuela ha hecho que las empresas empiecen a repensar si vale la pena o no invertir en este país.
Por ejemplo, Ford, según Reuters, ya decidió que no aportará 800 millones de dólares como inversión a sus plantas y que, según expertos consultados, podría evaluar la eliminación de sus subsidiarias en Venezuela a partir de sus resultados financieros .
Todas las empresas que están en Venezuela piden que se les permita la repatriación de sus divisas , dijo Maldonado.
El principal problema para las industrias colombianas y todas las extranjeras instaladas en Venezuela, según Ronal Rodríguez, director del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, es que existe ese paralelismo en las tasas de cambio, lo que les impide ser competitivas entre industrias.
Al existir la diferencia entre productos básicos y la nueva tasa hace que tengan que competir en un terreno difícil , dijo Rodríguez. A compañías como Totto, especializada en comercio electrónico, les resulta muy costosa la importación de sus productos porque no pueden acceder a la tasa cambiaria para las materias primas.
Por eso, las empresas extranjeras han tenido que hacer sus reajustes para competir en un mercado que no les está dando garantías. Todas las empresas tienen que hacer un reajuste en sus balances, hay que hacer previsiones para este año que va a ser difícil , dijo Maldonado.
El dirigente gremial aseguró que la situación en Venezuela se mezcla con devaluación e inflación. Nosotros hemos advertido a los empresarios que este año no van a tener atenuante. La inflación requerirá, más que insistir en estas políticas, en darle una oportunidad al libre mercado , dijo.
Alpina, Avianca, Colombina y Grupo Nutresa, consultadas por La República, de la Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE), prefirieron no pronunciarse sobre este tema.
Lo cierto es que para los analistas internacionales como Luis Nelson Beltrán, doctor en Investigación y Desarrollo Económico, todas las empresas extranjeras en Venezuela están perdiendo su valor comercial.
A las compañías que más importan no se les están entregando divisas para comprar sino que están parando su producción , dijo. Además, se espera que el Gobierno siga endureciendo el tipo de cambio dada la crisis petrolera mundial y, en el caso de Venezuela, las reservas seguirán cayendo.
Beltrán agregó que Alpina es una empresa netamente importadora y que al no darle las divisas para su operación puede estar perdiendo oportunidad de negocio en el mercado interno.
Todos los expertos coinciden en que lo mejor que pueden hacer para protegerse ante esta devaluación, es un seguro cambiario. No obstante, el sistema financiero no les ayuda a las empresas. Según medios locales, los seguros de los créditos han aumentado su precio casi el doble de lo que era en el 2014, lo que impide que sea una estrategia para minimizar el riesgo porque sale muy costosa. Las compañías, al no tener herramientas, están rediseñando sus planes de inversión y de ventas que cada vez están más limitados.
Las extranjeras están saliendo de Venezuela
Según el director de la Cámara de Comercio de Caracas, Víctor Maldonado, cada vez son menos las empresas que deciden permanecer en Venezuela. Hoy no se conoce cuántas extranjeras siguen instaladas, lo que sí sabemos es que unas se han relocalizado y no tenemos noticias de nuevas inversiones .
Para el empresario, el país está dejando de ser atractivo para la llegada de nuevo capital y, además, quienes están instalados están viendo el futuro negro por las salidas de las firmas. Nos estamos quedando de últimos en la fila , dijo.