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¿Comprarías café escupido por murciélagos? en Madagascar la bebida es un éxito
En los ricos suelos volcánicos de la provincia de Itasy, en el centro de Madagascar, crece un café fragante y escaso, codiciado tanto por los murciélagos como por las personas. Pero hay un giro, los humanos lo quieren aún más después de que los murciélagos lo mordisquean.
En los ricos suelos volcánicos de la provincia de Itasy, en el centro de Madagascar, crece un café fragante y escaso, codiciado tanto por los murciélagos como por las personas. Pero hay un giro, los humanos lo quieren aún más después de que los murciélagos lo mordisquean.
Los murciélagos mastican las cerezas maduras y la reacción entre los fluidos digestivos en su saliva y el aire le da a los granos un sabor de una suavidad única, afirman los consumidores, con lo que la demanda por el café Bourbon Pointu ha llevado a su precio a casi 220 euros por kilogramo.
Los caficultores de todo el mundo están recurriendo cada vez más a granos de especialidad y raros, algunos de los cuales incluyen un toque animal, para impulsar sus ingresos en medio de una oferta masiva global que ha derribado los precios.
Pero esta podría ser la primera vez que tal café se produce comercialmente en África, dijo Matthew Harrison, comprador de Trabocca, firma de suministro de café de especialidad.
Madagascar solía producir mayormente la variedad robusta, de menor calidad y usada para el café instantáneo, pero ahora caficultores como Nirina Malala Ravaonasolo están cultivando Bourbon Pointu, variedad premium del café arábiga, de mayor valor.
"Antes, la mayoría de la gente acá en Itasy no tenía interés en cultivar café", indicó Ravaonasolo, presidenta de un grupo local de productores. "Ahora se ha vuelto nuestro medio de vida".
Por su parte, Ronald Van der Vaeken, empresario hotelero local, originario de Bélgica, afirma que "Es muy especial (...) con el café normal, después de dos minutos uno olvida el sabor, pero este se queda por mucho tiempo en la boca. No es ácido (...) es muy bueno".
La producción surgió por iniciativa de Jacques Ramarlah, agricultor y emprendedor. Hace dos años, reintrodujo las semillas del Bourbon Pointu al área desde la cercana isla Reunión. Posteriormente, introdujo a los murciélagos, tras observar que mordisqueaban las mejores semillas.
Ahora Ramarlah trabaja con cerca de 90 productores que le envían los granos para su procesamiento y comercialización, algunos en su propio restaurante.
Las fincas generaron dos toneladas de café este año y hay de planes de llegar a las 20 toneladas para 2021, para exportar a mercados exigentes como Japón. Los clientes de Ramarlah son en su mayoría restaurantes y hoteles de lujo en la zona.