Una gestión eficaz: 4 palancas para impulsar el negocio

En mi experiencia como líder empresarial he descubierto que una gestión eficaz se construye sobre pilares sólidos y dinámicos. En este artículo, profundizaremos sobre cuatro palancas que he utilizado para administrar con éxito diversas empresas. Estas son: gestión de resultados, ejecución de la estrategia, agenda de oportunidades y riesgos, y agenda de relacionamiento.

1. Gestión de resultados: El combustible del negocio

La gestión de resultados va más allá de cumplir con un presupuesto; es la brújula que nos indica si vamos en la dirección correcta. Yo le llamo la gestión del pasado reciente y el futuro inmediato, pues los resultados son consecuencia de algo que ya ocurrió, pero a la vez, nos permite identificar tendencias, fortalezas y áreas de mejora. Esta información nos lleva a tomar acciones y tácticas para ajustar el futuro inmediato y alcanzar nuestros objetivos.

Algo fundamental es definir y monitorear indicadores clave de desempeño (KPI's), pues a través de ellos se puede medir el progreso y tomar acciones correctivas de manera oportuna. Igualmente, es esencial analizar brechas entre los resultados actuales y los objetivos establecidos para priorizar las decisiones a tomar. Además, es un espacio para la retroalimentación continua y con ello, fomentar una cultura abierta y honesta que permita aprender de los errores y mejorar continuamente.

2. Ejecución de la estrategia: El mapa hacia el futuro

La estrategia es el camino trazado para alcanzar una visión; es el mapa que nos guía hacia el futuro deseado. Al definir una estrategia clara y ambiciosa, alineamos a toda la organización hacia un objetivo común. A esto, yo le llamo la gestión del mediano y largo plazo; es la evolución o transformación que deseamos para la organización en el futuro.

Incorporar a la estrategia la transformación digital es fundamental para mantenerse competitivo, pues la tecnología está mutando rápidamente los negocios. Igualmente, un elemento crítico en el éxito a largo plazo, es fomentar una cultura de innovación y adaptabilidad, pues lo primero es crucial para desarrollar nuevos productos, servicios y modelos de negocio, mientras que lo segundo es clave para adaptarse a los cambios constantes del entorno.

3. Agenda de oportunidades y riesgos: Navegando en la incertidumbre

El entorno empresarial es complejo y volátil, por lo que una agenda de oportunidades y riesgos nos permite identificar y gestionar los factores que pueden impactar nuestro negocio. Esto demanda un análisis PESTEL, para evaluar el entorno político, económico, social, tecnológico, ambiental y legal, y así identificar tendencias y posibles riesgos. Es acá donde aparecen las oportunidades en las que podemos influir, así como los peligros que se deben mitigar.

Parte fundamental de esta agenda es contar con un manual de gestión de crisis, esencial para desarrollar los planes de contingencia y estar mejor preparados para hacer frente a situaciones inesperadas, minimizando con esto el impacto en el negocio.

4. Agenda de relacionamiento: Construyendo relaciones sólidas

Las relaciones son un activo muy valioso para cualquier persona y empresa. Al construir relaciones sólidas con clientes, proveedores, socios y reguladores, podemos crear una red de apoyo que nos permita alcanzar nuestros objetivos. La adecuada gestión de stakeholders es requerida para el éxito de cualquier iniciativa, pues es donde identificamos y manejamos las expectativas de los diferentes grupos de interés. Igualmente, una comunicación efectiva, clara y transparente, construye relaciones de confianza e inclusive invita a la co-creación de valor, para así generar soluciones transformadoras al tiempo que se fortalecen las relaciones.

En resumen, estas cuatro palancas son fundamentales en la gestión eficaz de un negocio. No son independientes, por lo que deben estar interconectadas entre sí. Por lo tanto, es de vital importancia su integración para fomentar organizaciones resilientes e innovadoras, con una visión más amplia de su entorno y con resultados contundentes.

Como líder, tu función es facilitar el funcionamiento del negocio, dar foco, alinear a los equipos y proporcionar la dirección estratégica. Al utilizar estas cuatro palancas, te aseguro que tu empresa estará mejor preparada para enfrentar los desafíos del futuro y aprovechar las oportunidades que se presenten.