Patronal negociará prestaciones con sindicatos

Una vez aprobada la reforma fiscal, el sector patronal del país iniciará negociaciones con los sindicatos para revisar los contratos colectivos de los trabajadores, ya que las prestaciones sociales serán gravadas de 53% en adelante, lo que impactará en el costo de generar empleos.

Juan Pablo Castañón, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), expresó que existe malestar en el sector empresarial por la miscelánea fiscal, tenemos que retomar la conversión con los sindicatos en las empresas, porque las prestaciones sociales serían gravadas y esto repercutirá necesariamente en el costo de la contratación .

Se analizará la reacción de cada empresa, porque tenderán a disminuir los empleos, probablemente haya disminución en las prestaciones, alertó.

En entrevista, Castañón refirió que los empresarios inician charlas con los sindicatos debido a que las prestaciones no obligatorias que dejarán de ser deducibles al 100% están suscritas en los contratos colectivos de trabajo, pero ante la elevación de su costo a partir de 2014 tendrán que negociarse.

Según a la empresa le convenga en su relación con los trabajadores, optará por la disminución de prestaciones, relaciona laboral o probablemente recurrir a las herramientas legales que sean necesarias para proteger el empleo.

Privilegios políticos

Con la aprobación de los nuevos e incremento de impuestos como el IEPS, en la reforma fiscal sólo se conservó privilegios de la clase política y del sector informal, que derivan de ocurrencias, de jaloneos y negociaciones políticas, reprochó el sector patronal del país.

Juan Pablo Castañón acusó que los impuestos avalados ayer, sólo quitarán recursos al sector productivo y a las familias mexicanas, para "financiar un aparato burocrático creciente y sin compromisos reales para ser más eficiente. Este camino, de seguir, nos conducirá inevitablemente a pagar sus consecuencias".

Coparmex, dijo, deja constancia de que los legisladores del PRI, el PRD y el PVEM, sin un sentido de responsabilidad, aprobaron nuevos impuestos sin hacer las consideraciones técnicas de rigor, sin pensar en las afectaciones que introducen, al votar en la mayoría de los casos en bloques partidistas y sin tomar en cuenta la representación social que tienen.

México no debe suscribir el modelo asistencialista que supone esta miscelánea fiscal, porque ya hemos vivido sus efectos nocivos de estancamiento económico y de pobreza recurrente , refirió.

lgonzalez@eleconomista.com.mx