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Baja California y Chihuahua lideran en calidad laboral del país
Tlaxcala, Ciudad de México y Tabasco se colocaron en los últimos lugares del Índice de calidad y competencia de la ocupación estatal de El Economista.
Baja California y Chihuahua, representantes de la frontera norte del país, fueron los estados que presentaron las mejores condiciones de calidad laboral en todo el territorio nacional al cierre del tercer trimestre del 2021, tras la degradación en el mercado laboral que ocasionó la pandemia de Covid-19.
De acuerdo con el Índice de calidad y competencia de la ocupación estatal de El Economista, en el periodo julio-septiembre del año en curso, dos entidades se colocaron en semáforo verde, que es el nivel alto.
El primer lugar corresponde a Baja California con 83.6 puntos de 100 posibles; la segunda posición fue para Chihuahua con 82.4 puntos.
Baja California regresó al lugar de honor después de que Aguascalientes lo desplazara el trimestre previo, estado que después de un año y medio retomó el primer escalón nacional en las condiciones de calidad y competencia del mercado laboral.
Desde el segundo trimestre del 2019, alguna de estas dos entidades ocupa el primer lugar en este índice, situación que cobra importancia por la merma que ocasionó la pandemia.
Las fortalezas de Baja California derivan de registrar bajos umbrales de subocupación, informalidad y en ocupación parcial y desocupación.
En tanto, el estado de Chihuahua destacó por ostentar la menor tasa de ocupación en el sector informal y la segunda más baja en ocupación parcial y desocupación.
En la parte de arriba del nivel medio alta, semáforo amarillo, se ubicaron con más de 70 puntos Jalisco, Aguascalientes, Querétaro y Nuevo León, demostrando también que sus condiciones laborales, respecto al resto del país, son positivas.
Las entidades de Coahuila, Colima, Sinaloa, Morelos, Baja California Sur, Sonora y Quintana Roo completaron el nivel medio alto.
En el nivel medio bajo, semáforo naranja, estuvieron los territorios de Tamaulipas, Michoacán, Durango, Guerrero, Zacatecas, Nayarit, Yucatán, Chiapas, Hidalgo, Puebla, Guanajuato, Oaxaca y Veracruz.
Las calificaciones más bajas (las peores condiciones laborales y que aún no se recuperan del efecto negativo de la pandemia) fueron en San Luis Potosí, (33.2 puntos), Campeche (31.6), Estado de México (30.9), Tabasco (26.2), Ciudad de México (25.8) y Tlaxcala (10.5), todos en semáforo rojo.
Sobresale que en este nivel están desde el inicio de año la capital del país y el Estado de México, los motores económicos nacionales, ya que aportan alrededor de 25% del PIB y 21% de la población ocupada total.
Tanto para la Ciudad de México como para el territorio mexiquense, su talón de Aquiles corresponde a los desocupados, a los ocupados que buscan empleo y a la población ocupada que trabajó menos de 15 horas a la semana.
Avances y retrocesos
En relación con el Índice de calidad y competencia de la ocupación estatal del tercer trimestre del 2020, 16 entidades mostraron avances, resaltando Quintana Roo (incremento de 27.7 puntos), Coahuila (13.3), Querétaro (12.1) Baja California Sur (9.4) y Jalisco (6.6).
Otros avances importantes se presentaron en Oaxaca (6.6 puntos), Tamaulipas (5.5), Nuevo León (5.1), Tabasco (3.1), Guanajuato (2.3), Chiapas (2.0) y Sinaloa (2.0).
Mientras los retrocesos más pronunciados se dieron en Veracruz (-7.4 puntos), Campeche (-8.2), Aguascalientes (-9.0), Ciudad de México (-9.8) y San Luis Potosí (-18.0).
Nayarit, Guerrero, Morelos, Durango, Puebla, Hidalgo, Tlaxcala, Baja California, Zacatecas, Estado de México y Michoacán fueron las otras entidades que bajaron puntos en el índice de calidad laboral.
Por nivel, únicamente cuatro estados mejoraron: Baja California Sur pasó de semáforo naranja a amarillo; Guanajuato y Oaxaca, de rojo a naranja, y Quintana Roo de rojo a amarillo.
Al otro extremo, seis entidades retrocedieron: Aguascalientes de semáforo verde a amarillo; Michoacán de amarillo a naranja, y Ciudad de México, Campeche, San Luis Potosí y Estado de México de naranja a rojo.
El objetivo
El objetivo del índice es saber cómo se encuentran las 32 entidades del país en materia laboral, principalmente en acceso al trabajo y calidad de la ocupación, y a su vez realizar un ranking de competencia entre los gobiernos locales.
El índice se hizo mediante ocho tasas complementarias de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi: desocupación, ocupación parcial y desocupación, presión general, trabajo asalariado, subocupación, condiciones críticas de ocupación, informalidad laboral y ocupación en el sector informal.
En cada tasa se realizó un ranking estatal para asignar un valor. Si el estado, por ejemplo, se ubicaba en último lugar de desocupación (Guerrero, con 1.59% de su población económicamente activa –PEA–), se le daba la mayor cantidad de puntos por ostentar la mejor posición en calidad laboral (32 puntos), en relación con las otras entidades, y viceversa para aquellas que se encontraron en los primeros escalones (Ciudad de México obtuvo una desocupación de 6.99% de la PEA, la más elevada, por lo que consiguió sólo 1 punto).
Este ejercicio se hizo con cada uno de los estados, al cierre de los terceros trimestres del 2020 y del 2021, logrando un índice general con ocho tasas, con el mismo peso cada una, cuyo resultado se convirtió en un indicador con escala de 0 a 100 puntos, donde la entidad más cercana a 100 manifiesta una mejor calidad de la ocupación.
Metodología
Por el tipo de metodología, el total de puntos siempre dará 1,650 puntos divididos entre las 32 entidades, por lo que, al presentar los mejores resultados, tendrán más puntos. Se pueda dar un escenario donde todos los estados empeoren en sus indicadores, pero los que tengan caídas menos pronunciadas, saldrán mejor posicionados en el índice.
El índice se dividió en cuatro niveles: alto (mayor a 80 puntos), medio alto (menor a 80 y mayor a 55), medio bajo (menor a 55 y mayor a 35) y bajo (menor a 35).
La función de este indicador es premiar a los estados con mayor constancia en acceso al empleo y calidad laboral.
