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Finanzas Personales

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Antes de ser aval, considere si conviene o no aceptar

Aceptar ser deudor solidario conlleva una responsabilidad que de no cumplirse afectará sus finanzas.

Existen ocasiones en las que por querer ayudar a alguna amistad o a un familiar, no se dimensiona las consecuencias que esto puede traer a futuro. Uno de estos casos es cuando se acepta ser aval de sus deudas sin tomar en consideración todo lo que ello conlleva, para que pueda tomar la decisión de manera más informada es importante considerar diversos factores.

Antes que nada es importante recalcar que aceptar ser aval conlleva a responsabilizarse por el compromiso financiero de una persona, por ejemplo, algún crédito.

“Tu firma es como decirle a la institución ‘confío tanto en que mi amigo, familiar o conocido es buen pagador, que yo respondo por él’. Decidir ser o no ser aval es algo que no puedes tomar a la ligera”, destacó la reparadora de crédito Resuelve tu Deuda.

En primera instancia, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), recordó que si funge como referencia tome en cuenta algunos datos importantes de sus amigos o familiares, pues de ello dependerá también el otorgamiento del crédito de quien le pida ser referencia.

“Preguntas como: cuánto tiempo tienes de conocerlo, cómo y dónde se conocieron, la relación que llevan y parentesco, son las más comunes”, agregó.

La Condusef advierte que involucrarse como aval de una persona tiene repercusiones no sólo para la persona que adquirió el crédito sino también para el aval en el sentido de que tanto el aval como el deudor se reportan al Buró de Crédito.

“Otra consecuencia negativa en caso de impago por parte del deudor es que ese atraso se reporta para ambos ante el Buró de Crédito, con una mala nota ante otras entidades financieras y disminuyendo la posibilidad de acceder a posibles créditos de manera futura”, refirió la comisión.

Una de las partes más “difíciles” en estas situaciones consiste en que, al tratarse de un familiar, amigo o conocido, muchas personas aceptan ser avales sin pensar las cosas de manera consciente, por lo que debe considerar a quién le estará haciendo el favor.

“¿Por qué es tan importante este punto? Porque tu patrimonio está de por medio. Debes asegurarte de que sea una persona cercana, responsable y confiable”, destacó Resuelve tu Deuda.

Incluso, recomendó que si es posible se pueda revisar el historial crediticio de la persona que adquirirá el crédito antes de dar el “sí, acepto”, así, dijo, podrá saber de si es o no un pagador responsable.

Lo que debe considerar

De acuerdo con la Condusef es importante que antes de aceptar ser aval considere cuatro puntos, sin importar la persona que le pide ser su deudor solidario.

El primero, destacó, consiste en preguntarse “¿quién te lo solicita?”, para ello debe considerar todo lo que sepa de esa persona que le pide ser su aval, si se trata de un familiar, amigo o conocido.

“Verifica que sea alguien responsable y formal, puedes investigar sus hábitos de pago al preguntar a otras personas sobre su comportamiento”, dijo la comisión.

El segundo punto tiene que ver con el tipo de crédito que tu avalado va a contratar.

“Hay que tomar en cuenta que la deuda podría llegar a ser tuya y debes estar informado sobre los detalles por cualquier contingencia que llegara a presentarse”, mencionó.

La Condusef dijo que el tercer punto consiste en la solvencia económica, ya que ésta es primordial debido a que deberá estar preparado en caso de que el avalado necesite ayuda con su préstamo y así evitar problemas.

El cuarto punto a considerar recae en sus ingresos ya que éstos deben ser estables y no contar con alguna deuda que ponga en riesgo sus finanzas o bien, que cuando sea necesario ayudar a su avalado se encuentre listo para hacerlo.

¿Dejar de ser aval?

Es posible que se arrepienta de ser aval y aunque existen nulas posibilidades de dejar de ser esa figura, la Condusef refiere que existe una mínima posibilidad, sin embargo la última palabra la tiene la institución financiera que otorgó el crédito, ya que ésta sólo puede autorizar el cambio que, agregó, no es sencillo.

Además, también deberá cumplir una serie de requisitos que tanto el deudor como el aval deben tener presentes, para ello es importante que antes de aceptar se revisen las condiciones establecidas en el contrato.

Si ya es aval, Resuelve tu Deuda recomienda no desatenderse de la persona que adquirió el crédito o compromiso financiero por muy responsable que sea.

finanzas.personales@eleconomista.mx

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