¿Qué es el tipo de cambio FIX y para qué sirve?

Cuando se escucha en una conversación o en las noticias el concepto de tipo de cambio prácticamente todos tienen la misma referencia: el número de unidades requeridas de una divisa (por ejemplo, el peso) para comprar alguna otra (como el dólar). Pero el llevar los conceptos en práctica nunca es tan sencillo.

Eso se debe a que esta cifra no es un número estático y en México se modifica todos los días según la oferta y la demanda en el mercado, que a su vez se mueve por las decisiones de quienes lo integran. Esta característica, que no es del peso sino de un enorme sistema, complica la tarea de encontrar una referencia.

Algunas agencias de información realizan sus propios cortes de caja, los cuales suelen establecer con información de plataformas de negociación en el horario de cierre de las bolsas de valores. Pero se trata de cifras con objetivos meramente informativos y sin la autoridad que se necesita para dar referencia.

El Banco de México (Banxico) tiene la autoridad indiscutible en esta materia y por eso lunes a viernes da a conocer el tipo de cambio FIX (fijo). Se trata de una variante de los diferentes regímenes cambiarios existentes que se aplican en los mercados mexicanos y tiene como objetivo estabilizar la paridad.

Régimen cambiario

¿Pero qué significa régimen cambiario? Cada país determina el tipo de cambio por el régimen cambiario aplicado por sus bancos centrales o autoridades monetarias. Es decir, estas instituciones seleccionan la forma de administrar el valor de su moneda cuando se compara con otras, incluido nuestro peso.

México ha utilizado varios regímenes cambiarios en su historia, pero los principales han sido el fijo, el flexible y las bandas cambiarias. Cada uno de estos tres métodos tiene sus propias implicaciones. En el espacio de información de su sitio oficial, Banxico define a esos regímenes de las siguientes formas.

• El fijo es un sistema en el cual el banco central establece el tipo de cambio adecuado e interviene en el mercado para garantizar que se mantenga.
• El flexible, también llamado flotante, permite que el precio sea determinado mediante oferta y demanda, sin que haya intervención de la autoridad.
• El esquema de bandas cambiarias es el punto medio entre los dos anteriores. La autoridad monetaria fija un techo y un piso entre los que deja que el par opere e interviene si alcanza alguno de los límites.

¿Y el FIX?

En 1994 la Comisión de Cambios, que es integrada principalmente por miembros del Banxico, y de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en menor número, determinó que el régimen cambiario que se utilizaría en México sería el de la libre flotación; es decir, el de oferta y demanda.

Pero desde 1991 el banco central ha publicado un tipo de cambio de referencia (el que conocen como tipo de cambio FIX). Se trata de un número que los particulares pueden emplear para transacciones que involucran el intercambio de divisas en el extranjero, trátese de importaciones o exportaciones.

Cabe decir que no es una obligación hacerlo y las partes involucradas en la operación (negocio) son libres de acordar cualquier referencia. A pesar de esto, muchos sectores prefieren mantener la publicación del Banxico como la referencia confiable para estas operaciones, a veces por varios millones.

¿Cómo se obtiene?

El Banxico extra el FIX de un promedio de cotizaciones del mercado cambiario. Cabe mencionar que este tipo de cambio es para operaciones pagables el segundo día hábil bancario tras el cálculo y entra al Diario Oficial de la Federación (DOF) un día hábil posterior a la fecha del cálculo.

Tras promediar todas las operaciones cambiarias (libre flotación) después de las 12:00 horas de un lunes, por ejemplo, y las operaciones del día siguiente y el miércoles hasta mediodía (lo que suma 24 horas bancarias) la cifra promedio resultante es considerada como el nuevo tipo de cambio FIX.

jose.rivera@elecconomista.mx