AMLO y la intercampaña

El cierre de las precampañas abre un impasse en el proceso electoral federal. Para el arranque formal de la contienda presidencial faltan las próximas seis semanas y en este periodo se diluirá el posicionamiento de tres candidatos perfilados por las formaciones partidistas.

Tal vez Xóchitl Gálvez ignoraba las reglas de la intercampaña cuando retó a Claudia Sheinbaum a debatir —una o varias veces— antes de que terminara la semana. El INE tendrá que garantizar que en los próximos 41 días ni ellas ni Jorge Álvarez Máynez aparezcan en mensajes, seminarios, mesas redondas o tertulias organizadas por medios electrónicos de comunicación que involucren a más de un aspirante presidencial. Los spots que podrán pautar los partidos en este periodo sólo pueden ser de carácter informativo. ¿Y la mañanera de Palacio Nacional? La veda electoral aplicará al Ejecutivo federal hasta que arranquen las campañas, el próximo 1 de marzo.

Entonces será el tiempo de las propuestas concretas. En las precampañas, los aspirantes también tuvieron prohibido ser específicos en sus ofertas y tuvieron que recurrir a una retórica —“yo sueño/yo anhelo”— de chicha y nabo. La polarización, empero, resulta inevitable. Unos critican a la vieja política y se asumen como los nuevos. Los que hace seis años ofrecían el cambio verdadero ahora pugnan por la continuidad. México —sostienen— debe decidir por mantener la transformación o el regreso del pasado…

El alineamiento de la elección, ¿es un referéndum sobre el lopezobradorismo? El líder tabasqueño no estará en la boleta electoral por primera vez en los últimos 30 años, pero será el protagonista de la contienda presidencial.

Para aquellos que aún sopesan si los candidatos o la identidad partidistas serán determinantes en la decisión del electorado, un dato que circula profusamente entre los líderes de la sociedad civil que respaldaron la nominación de la exsenadora hidalguense: dos terceras partes de la población considera que hay corrupción en el gobierno del presidente López Obrador. Otro: a poco menos de cinco meses de las votaciones, 40% de la población aún no conoce a Sheinbaum o a Xóchitl. Uno más: el porcentaje de la población que manifiesta haber decidido su voto es inusualmente alto, no tiene precedente en las últimas tres décadas.

A favor o en contra de AMLO. Ese es el issue de esta contienda presidencial. Y por lo mismo, el escenario ideal para convertirlo en el blanco de la campaña negativa más grande en la historia electoral mexicana. Por la inseguridad. Por la violencia. Y por la corrupción.

Efectos secundarios

DISCRIMINADOS. La dirigencia nacional de Morena confirmó que cuatro diputados lopezobradoristas no podrán participar en el proceso interno en Morelos por la misma razón que impidieron a Lucy Meza participar en la encuesta de evaluación por la candidatura a la gubernatura, a pesar de ser la más competitiva: presuntos nexos con el Fiscal de Morelos, Uriel Carmona. Meza denunció la violación a sus derecho político-electorales y ahora es la abanderada del Frente Amplio.

INSISTENCIA. El exdiputado federal, Pablo Trejo, tomó la iniciativa y llamó a la decena de aspirantes a la candidatura de Morena en la alcaldía Iztacalco, para suscribir un acuerdo de unidad total cuya aceptación implica respetar la decisión de la cúpula partidista. Para evitar que alguien los rebase por la izquierda, la dirigencia que encabeza Sebastián Ramírez formalizará el emplazamiento. Mientras, sigue la duda: ¿habrá regla de paridad o será pon encuesta?