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Opinión

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Alerta de nueva crisis en la aviación

Llama la atención que el sector de la aviación esté ausente en las agendas de las dos candidatas presidenciales. Ciertamente es un sector que ha sufrido un retroceso en los últimos seis años y se encuentra nuevamente en el umbral de una crisis. Es un tema que requiere atención.

La crisis, como sabemos, inició con la arbitraria cancelación del proyecto del NAICM de Texcoco por razones puramente ideológicas. Era un proyecto de clase mundial que hoy estaría funcionando con beneficios para la comunidad, el gobierno, el turismo, los pasajeros. Hubiese sido un hub internacional de conectividad de gran escala. A cambio de dilapidar miles de millones de pesos, incluyendo un gran sobrecosto, lo que obtuvimos fue un inútil aeropuertito de nivel regional totalmente subutilizado, a tal grado que en los dos últimos años ha acumulado pérdidas que exceden 2,500 millones de pesos. El capricho lo financiamos los contribuyentes. Obligar la transferencia de vuelos de carga del AICM al AIFA resultó en un esperado fracaso.

Otros aspectos de la crisis en el sector: recuperar la categoría 1 de seguridad aérea llevó más de dos años, pero la Organización de Aviación Civil Internacional ha seguido expresando su preocupación por la seguridad operacional del sistema de aviación mexicano. Por ello, próximamente podría presentarse una vez más la degradación a categoría 2.

Por otro lado, el mantenimiento de las dos terminales del AICM es pésimo: suciedad, techos desmoronándose y con goteras, pisos con hoyos, servicios deficientes de acceso para pasajeros, insuficiencia de taxis. El viajero percibe una sensación de abandono. La saturación lleva a incomodas filas en los pasillos y a constantes retrasos en horas de salida y llegada.

Asimismo, la Agencia Federal de Aviación Civil acaba de informar que el trámite de licencias y la capacitación de pilotos registraron fuertes caídas durante el primer trimestre de 2024 en relación con el mismo trimestre del año previo. La caída de licencias fue de 43% y la de la capacitación de 32 por ciento. Ello da cuenta de los insuficientes recursos para destinar al desarrollo de capital humano y tecnología.

La ocurrencia de operar una aerolínea comercial militar (Mexicana), se suma a las decenas de disparates de la 4T generadores de pérdidas y despilfarros.

Para Xóchitl Gálvez este sector debería ser una preocupación prioritaria. En caso de resultar electa, deberá considerar la necesidad de un aeropuerto nuevo y moderno, y montar la participación del sector privado en la solución. Ampliar o rehabilitar el AIFA es imposible. Entretanto, deberá corregir las deficiencias de mantenimiento en el AICM. Tendrá que considerar recursos para capacitación y sobre todo, para mejoramiento tecnológico. Si el sistema cae en categoría 2, deberá corregir con prontitud las deficiencias para retomar la categoría 1. ¿Qué hacer con Mexicana? Cancelar esa fuente generadora de pérdidas.

Ante las grandes destrucciones que ha hecho la 4T, quizás esta alerta de crisis para el sector de la aeronáutica civil pase a segundo plano. Pero es, en definitiva, una problemática prioritaria que deberá ser atendida presupuestariamente y con planeación.

X: @frubli

Economista egresado del ITAM. Cuenta con Maestría y estudios de doctorado en teoría y política monetaria, y finanzas y comercio internacionales. Columnista de El Economista. Ha sido asesor de la Junta de Gobierno del Banxico, Director de Vinculación Institucional, Director de Relaciones Externas y Coordinador de la Oficina del Gobernador, Gerente de Relaciones Externas, Gerente de Análisis Macrofinanciero, Subgerente de Análisis Macroeconómico, Subgerente de Economía Internacional y Analista.

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