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El banco clientelar
Cada vez que alguien acuda a un Banco del Bienestar para recibir su apoyo, seguramente se le entregará en un sobre con el sello de Morena, para que al momento de votar se acuerde bien quién le está otorgando esta dádiva.
La decisión de construir 2,700 sucursales en tan sólo dos años del Banco del Bienestar ha sido duramente cuestionada y criticada por muchos. Me parece importante reiterar algunos de los puntos acerca de esta mala decisión.
1. Se ha justificado que serán locales pequeños y que, sobre todo, se localizarán en regiones rurales apartadas, donde no hay servicios cercanos de banca para dispersar los recursos a los beneficiarios de los programas sociales. Andrés Manuel López Obrador criticó al Banco de México porque considera a estas sucursales “un anacronismo, puede ser hasta un sacrilegio, porque sus concepciones son otras”. Pero la noción obsoleta es que se crea que se necesita distribuir físicamente el dinero a través de un mostrador. Incluso esto es contrario al Plan Nacional de Desarrollo, que señala que hay que procurar disminuir el uso de efectivo, ya que la tendencia mundial es hacia la digitalización de estos servicios. Es una red mucho más barata. Con un teléfono celular se pueden recibir los recursos y efectuar pagos. ¿No sería preferible entregar un aparato celular a los beneficiarios de los recursos?
2. El presidente señaló que el costo anual de operar 2,700 sucursales es de 6,000 millones de pesos (mmp) y que estas sucursales dispersarían 300 mmp, con lo que propone financiar la operación con una comisión de 2 por ciento. Pero la tecnología bancaria celular permitiría comisiones mucho menores. Además, hay que considerar que una proporción importante son los gastos en seguridad ante la evidente vulnerabilidad de estos locales.
3. Serán construidas por militares transformados en albañiles. El costo de edificación de las primeras 1,350 sucursales en el 2020 es de 5 mmd. Pero todavía no hay detalles de obra como planos arquitectónicos para cada una ni la localización precisa. Tampoco se ha revelado con transparencia de dónde provendrán esos recursos, puesto que el presidente simplemente dijo que serán “ahorros presupuestales”. ¿Acaso intercambió tratamientos de cáncer por ladrillos?
4. Tener miles de sucursales del Banco del Bienestar no contribuye a la inclusión financiera como se ha defendido. Ésta implica tener acceso a diversos instrumentos de ahorro y créditos, lo cual no ofrece el Banco del Bienestar. Dispersar beneficios de programas sociales no es bancarizar.
5. La banca comercial opera hoy cerca de 12,000 sucursales. El director del Banco del Bienestar ha dicho que el plan es tener para el 2024 un total de 13,000 sucursales, es decir, en los tres últimos años del sexenio se construirán 10,000 sucursales. ¿Tiene esto sentido? Económicamente no, pero políticamente sí. La verdadera intención de López Obrador es clientelar. Cada vez que un beneficiario acuda a la sucursal para recibir su apoyo, éste seguramente se le entregará en un sobre con el sello de Morena, para que al momento de votar se acuerde bien quién le está otorgando esta dádiva. Hubiera sido más honesto llamarlo el banco clientelar.