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Nuevos tiempos en la Secretaría de la Función Pública
El nuevo secretario deberá fiscalizar el desorden que es el sistema de compras del gobierno federal, que ha aprovechado la situación de emergencia sanitaria para comprar a precios exorbitantes.
Con la toma de protesta de Roberto Salcedo Aquino como secretario de la Función Pública, se da el relevo formal de Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, y con ello llega a su fin su poderoso clan.
El relevo de Sandoval dejó claras las querencias del presidente Andrés Manuel López Obrador en Guerrero, quien defendió a capa y espada a Félix Salgado Macedonio, acusado no sólo de dipsómano y depredador sexual, sino también de violentar las leyes electorales.
Al final de su mandato, Irma no implantó la austeridad en el gobierno, ni tuvo resultados en el combate a la corrupción, a los cercanos a AMLO (León Barttlet y Carlos Lomelí Bolaños, entre otros) ni un pelín de rana les tocó, tampoco pudo con el inmortal Félix Salgado. Ni secretaría ni gubernatura: ¿Qué fue de aquella Irma que se quería subir al tren de los presidenciables?.
Ahora, el turno de combatir la corrupción es de Roberto Salcedo Aquino, técnicamente un hombre capaz, habrá que ver si sus compromisos morenistas y priístas no constituyen una red que le inmovilice.
El nuevo Secretario deberá fiscalizar el desorden que es el sistema de compras del gobierno federal, que ha aprovechado la situación de emergencia sanitaria para comprar a precios exorbitantes. Hoy la adjudicación directa es la norma y la licitación la excepción. El problema de abasto de medicamentos es alarmante.
Tristemente, Salcedo Aquino deberá darle los santos oleos al Sistema Nacional Anticorrupción, desdeñado por la Dra. Sandoval y su equipo.
El nuevo titular deberá de remover a la red de funcionarios que le heredó Sandoval, inexpertos en las funciones de fiscalización, llenos de odio y sedientos de venganza.
Para muestra un botón, la titular del Órgano Interno de Control en el Instituto Nacional de Cancerología, la Licenciada María Araceli Acevedo Vázquez trae una fiesta inhabilitando a diestra y siniestra a funcionarios, el detalle es que están tan mal armados sus expedientes, que sus resoluciones son declaradas nulas por el Tribunal de Justicia Administrativa, es el caso de la sentencia al expediente 18690/21-17-09-5, dictada por la Novena Sala Regional Metropolitana, a la que inexplicablemente se niega a darle cumplimiento.
Querido secretario Salcedo si los titulares de los OIC no respetan la legalidad y no hacen caso a las sentencias judiciales, su lucha contra la corrupción es política ficción, como diría ya saben quién. Hasta la próxima.
Twitter: @ErosalesA