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Reforma al sistema de pensiones
CIUDAD DE MEXICO. 28AGOSTO2019.- Decenas de adultos mayores, acudieron solos o en compañia de algun familiar, al festejo por el dÃa del abuelo, que se realizó en la explanada central de la alcaldÃa de Venustiano Carranza. Efectivos de la Guardia Nacional en las inmedicaciones de la demarcación.FOTO: VICTORIA VALTIERRA / CUARTOSCURO.COM
Los retornos de inversión saludables no pueden sostenerse en una economía débil y es difícil ahorrar para la jubilación ... sin los ingresos de un trabajo.
Ben Bernanke, ex presidente de la Fed
El gobierno ha presentado una propuesta de reforma al sistema de pensiones que opera en México desde 1997. La propuesta presenta un gran avance en la dirección correcta, aunque deja pendientes otros de igual relevancia.
El aspecto más relevante es aumentar la contribución patronal de 5.15% del salario base de cotización a 13.875 por ciento. Este elemento permite que México pase de ser uno de los países con menor nivel de aportación (6.5%);a estar más cerca de la recomendación internacional (con 15 por ciento).
Adicionalmente, la cuota social que opera como contribución gubernamental de 1.125% para la totalidad de los trabajadores, se transformará en una cuota que beneficiará sólo a quienes tengan un salario de hasta cuatro Unidades de Medida de Actualización.
Conceptualmente, esto puede ayudar a que los trabajadores en el futuro, particularmente los de menores nivel de ingreso, mejoren sensiblemente su pensión futura; sin que ello signifique necesariamente que dicha pensión alcanzará a los niveles de un ingreso digno y suficiente.
La reforma reduce las semanas de cotización requeridas para alcanzar el derecho a una pensión garantizada, al pasar de 1,250 semanas necesarias, a 750.
A reserva de conocer la reforma al momento de su aprobación en el Legislativo, es importante aclarar que la reducción de las semanas de cotización implicará que un mayor número de personas acceda al derecho de una pensión garantizada y eso que es favorable, también implicará necesariamente una presión sobre el gasto fiscal del gobierno para los años subsecuentes. El hecho de que la cuota social ahora solamente se destinará a los trabajadores de menor ingreso no implica necesariamente un ahorro, ya que precisamente ahí se sitúa la mayor parte de los cotizantes.
No se toca un aspecto central, la edad de retiro. México mantiene una edad de retiro de 65 años que se estableció a finales del siglo XIX. En un país como México la esperanza de vida se ha movido en ese lapso en más de 20 años. Seguimos manteniendo una edad de retiro que lleva a que las personas aun productivas ya no sean consideradas en el mercado laboral, obligándolas a trabajar (informalmente) muchos más años, para compensar la gran cantidad de años que les restan en su vida de supuesto retiro.
El incremento en la carga patronal puede además generar efectos potencialmente negativos. Ante una obligación laboral que más que se duplica para las empresas, se pueden generar efectos de contención del crecimiento salarial para compensar esta carga adicional y, en otros casos, generar un incentivo a mayor informalidad o subregistro del salario.
En problemas tan complejos es prácticamente imposible tener soluciones mágicas. Está reforma apunta en un camino inicialmente correcto, pero requiere profundizar algunos temas y asegurarse que en el detalle de la legislación no se incorporen elementos adicionales que generen distorsiones.
Por supuesto, una reforma de pensiones sin políticas que contribuyan a la generación de empleos privados estables y mejor remunerados siempre será incompleta.
Un beneficio adicional, implícito, es que la reforma, por lo pronto acalla las voces de quién pretendían una vuelta a la visión de control gubernamental central de los fondos pensionarios. La experiencia de nuestro país; inclusive en los años previos a la mal llamada época neoliberal; cuando en los 70 y principios de los 80 imperaba el “nacionalismo revolucionario” (que hoy se pretende recobrar), mostró que el control gubernamental no atendió al interés genuino y al beneficio de los trabajadores en su retiro.
