Buscar
Arte e Ideas

Lectura 7:00 min

Acceso a la cultura, manzana de la discordia

La secretaria de Cultura anunció un nuevo programa y descartó el apoyo que estipula la Ley General de Cultura y Derechos Culturales.

Como servidora pública, María Cristina García Cepeda, secretaria de Cultura tiene como deber aplicar y garantizar la aplicación de las leyes y, el vale de cultura se trata de un mandato de ley, por lo cual no es un asunto opinable por un servidor público, sino una obligación intrínseca a su cargo , señala un grupo de senadores encabezados por Zoé Robledo y Mariana Gómez del Campo en un documento entregado a la H. Comisión Permanente del Congreso de la Unión.

La Ley obliga a la secretaria a establecer un programa para la asignación de vales culturales que permitan el acceso a bienes culturales a aquellas personas que simplemente no lo hacen, no porque no tengan gusto por este tipo de actividades, sino simplemente porque no tienen acceso a ellos por un asunto económico. Con ellos se desbloquea el impedimento económico y se garantiza el acceso a la Cultura y con ello el ejercicio pleno de los derechos culturales , argumentan.

No obstante, señalan los senadores, García Cepeda expresó lo siguiente:

Para mí sería muy fácil irme ahorita en una avioneta al lugar más apartado y desde ahí tirar vales para que todos los recojan, pero ¿de qué te va a servir un vale si ahí no hay una biblioteca, ni un teatro o una librería? No queremos que sea demagógico ni que sea algo asistencialista. A mí me encantó, no el nombre, yo no entiendo vales de cultura como tarjetitas o valecitos .

Por lo que los senadores mostraron su preocupación ante lo dicho: toda vez que fue realizada por la secretaria de Cultura y se inscribe en la época en que la frivolidad ataca desmesuradamente a muchos servidores públicos. El vale no puede ser tratado como una ocurrencia de parte de los legisladores. Queremos consolidarla como una política publica dirigida a los sectores de menores ingresos y cuyo acceso a la cultura es un derecho que difícilmente pueden ejercer y esa es tarea y responsabilidad del Poder Ejecutivo a través de la secretaria del ramo.

México requiere el ejercicio de políticas publicas serias e innovadoras en materia de cultura, toda vez que no podemos seguir repitiendo los mismos errores esperando nuevos resultados .

Ni tarjetitas, ni valecitos

La secretaria de Cultura, María Cristina García Cepeda, dejó claro en su más reciente comparecencia en el Senado de la República que convertirá los vales en una política pública de acciones en diferentes campos con cuatro ejes:

1. Cultura en tu comunidad, que atenderá a la población vulnerable que, por su ubicación geográfica y condición social y económica, difícilmente tiene acceso a los bienes y servicios culturales.

2. Cultura a tu alcance, que incluye la participación del sector privado en descuentos y beneficios en bienes y servicios culturales.

3. Cobertura nacional, que contempla estrategia transversal para involucrar a las entidades federativas en las acciones de beneficios social y cultural.

4. México es Cultura, una plataforma con información sobre beneficios que ofrecen los tres órdenes de gobierno y el sector privado en materia de cultura.

Ampliación de los programas de difusión artística y cultural, dando prioridad a los sectores vulnerables y de bajo nivel adquisitivo. Coordinación con los estados, municipios y alcaldías para incrementar la oferta cultural en zonas de alta marginación , se lee en el discurso entregado por la dependencia tras la comparecencia, dónde no estuvieron Zoé Robledo ni Mariana Gómez del Campo.

Cultura en tu comunidad: Llevaría Brigadas culturales de animación a la lectura, actividades para niños, presentaciones de danza y teatro con grupos independientes y exposiciones fotográficas con la participación de becarios y beneficiarios de apoyos del Fonca, Pacmyc y de los fondos estatales, aprovechando los programas de retribución social.

Cultura a tu alcance: sé realizarían acuerdos con empresas culturales del sector privado para crear una amplia oferta de descuentos e incentivos para el consumo cultural.

Librerías, tiendas de autoservicio y portales de comercio electrónico.

Teatros en la Ciudad de México y en las entidades federativas.

Museos privados en distintas entidades federativas y la Ciudad de ?México. Salas de exhibición cinematográfica. Presentaciones de obras de artes escénicas en vivo. Tiendas de artesanías.

Según el documento que envió la Secretaría de Cultura, de las casi 900,000 actividades culturales al año en todo el país, 82.86% de los asistentes lo hacen de manera gratuita (60 millones de personas).

Por su parte, el periodista Eduardo Cruz Vázquez, coordinador del Grupo de Reflexión sobre Economía y Cultura (Grecu-UAM) opinó sobre el tema.

María Cristina García Cepeda debería pedir al Congreso legislar para posponer su aplicación, por rebasar las condiciones de la dependencia, la cual carece de estructura para diseñar y operar los vales de cultura

Para Cruz, prácticamente la totalidad de la oferta cultural que genera el gasto público es subsidiada.

La subvención es un beneficio, un vale de facto. Por lo mismo, no cabe en la dimensión de lo establecido en el artículo 8. El senador Emilio Gamboa señaló que el PEF 2018 debe contener un capítulo para asignar recursos para entregar el vale. Es imposible que del ya insuficiente presupuesto de la dependencia, se tome para esta nueva responsabilidad. Eso es lo que debe hacer la señora García Cepeda, exigir fondos a quien autorizó la ley y esa medida .

¿Quién impulsó los vales ?de cultura en México?

La Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine) promovió en las Audiencias Públicas de la Ley General de Cultura los famosos vales de cultura.

Canacine propone destinar un mecanismo para impulsar este acceso con la creación de vales de cultura, con los cuales más ciudadanos tendrán mejor alcance a cualquier tipo de expresión cultural, incluyendo el cine , fue el texto que durante meses, el entonces director de Canacine, ?Agustín Torres, impulsó.

Se propone la creación de este insumo para que la población con un ingreso económico medio o bajo tenga mayor facilidad para acceder a productos o servicios culturales, como son la adquisición de libros, boletos para conciertos, teatro, clases de música, boletos de cine, etcétera. Mejorando considerablemente la calidad de vida de todos los mexicanos y fomentando el crecimiento de la producción cultural en todo nuestro país .

Canacine hablaba del éxito del vale de cultura en Brasil, que se entregan a un sector específico de la población con un salario bajo y hasta dio ideas para ponerlo en marcha.

El esquema para otorgar un vale de cultura podría, por ejemplo, otorgarse como un beneficio fiscal que los patrones pudieran dar a sus trabajadores y podrían posteriormente deducir de impuestos, teniendo un poco como referencia los vales de gasolina o los vales de despensa que funcionaban hace algunos años .

¿Qué dice la ley?

La Ley de Cultura y Derechos Culturales, en el artículo 8 estipula lo ?siguiente:

La Secretaría de Cultura coordinará ?y promoverá el programa de asignación de vales de Cultura con la ?participación del sector social y privado, de las entidades federativas, de los municipios ?y de las alcaldías de la Ciudad de México, para incrementar el acceso a la cultura ?de los sectores vulnerables .

vgutierrez@eleconomista.com.mx

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas