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Imponen nuevo Código de Ética a funcionarios públicos federales
A partir de esta semana los servidores públicos del gobierno federal tienen un nuevo Código de Ética al que estará sujeto su comportamiento.
La Secretaría de la Función Pública (SFP) expidió este martes el nuevo Código de Ética para los funcionarios del gobierno federal.
El documento publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) es aplicable a todos los funcionarios de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador y su aplicación será vigilada por los comités de ética de las diversas dependencias federales.
“La construcción de una nueva ética pública, la recuperación de la confianza de la sociedad en sus autoridades y el compromiso con la excelencia por parte de las personas servidoras públicas, son prioridades del Gobierno Federal”, expresa la titular de la SFP, Irma Eréndira Sandoval, en el documento publicado en el DOF este martes.
El Código de Ética tiene cinco principios rectores: legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia.
Este es el decálogo del servidor público:
- Trato igualitario a todas las personas, “evitando cualquier acción u omisión que menoscabe la dignidad humana, derechos, libertades o constituya alguna forma de discriminación”.
- Equidad de género. Fomentar la igualdad entre hombres y mujeres; respetar la identidad y orientación sexual.
- Lenguaje. Emplear lenguaje incluyente en la comunicación institucional, es decir, “visibilizar a ambos sexos, eliminar el lenguaje discriminatorio basado en cualquier estereotipo de género, y fomentar una cultura igualitaria e incluyente”.
- Respeto. Evitar conductas que violen los derechos humanos.
- Rendición de cuentas. “Cumplir con las declaraciones patrimoniales, de intereses y fiscales. Deberán presentarse con completa veracidad y transparencia en su contenido”.
- Conflicto de intereses. Un servidor público no puede participar en un asunto donde haya conflicto de intereses; es decir, cuando la persona esté impedida de cumplir con el principio de imparcialidad en el desempeño de su empleo.
- Transparencia. Al tener conocimiento de un asunto en el que haya conflicto de intereses o impedimento legal, deberán notificar a su jefe inmediato y solicitar “ser excusado de participar en cualquier forma, en la atención, tramitación o resolución del asunto”. Acatarán las instrucciones para la atención del asunto con imparcialidad y objetividad.
- Dádivas. Un servidor público no puede exigir o aceptar un regalo por motivo de sus funciones. Tampoco podrán recibir obsequios sus familiares ni “terceras personas con los que tenga relaciones personales, profesionales, laborales, de negocios, o para socios o sociedades de las que la persona servidora pública”.
- Devoluciones. Si un servidor público recibe un obsequio, deberá informarlo inmediatamente al Órgano Interno de Control y se pondrá a disposición del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes.
- Reconocimiento. Podrán aceptar los reconocimientos otorgados por instituciones públicas y académicas en tanto no implique un compromiso del ejercicio del empleo.
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La recuperación de la confianza en el servicio público se consigue instaurando una nueva ética basada en la honestidad, eficacia, el profesionalismo, la transparencia y la legalidad, expresa la SFP en el decreto.
Este código complementa a la Ley General de Responsabilidades Administrativas, promulgada el 18 de julio de 2016 y que reformó a la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos.
El Código de Ética se suma a las diez directrices que rigen la actuación de los Servidores Públicos, establecidas en el artículo 7 de la Ley General de Responsabilidades Administrativas.
Sólo con excepción del trato igualitario, el respeto a los derechos humanos y el conflicto de intereses, los puntos adicionales en la ley son los siguientes:
- Conducirse con rectitud sin utilizar su empleo para obtener o pretender obtener algún beneficio, provecho o ventaja personal o a favor de terceros.
- Satisfacer el interés superior de las necesidades colectivas por encima de intereses particulares.
- Actuar conforme a una cultura de servicio orientada al logro de resultados.
- Administrar los recursos públicos con eficiencia, eficacia, economía, transparencia y honradez.
- Abstenerse de realizar cualquier trato o promesa privada que comprometa al Estado mexicano.