3 acciones para eliminar el fastidio de los colaboradores

En algún momento de la vida, ya sea por una situación personal o externa, los colaboradores llegan a sentir fastidio o desánimo por lo que hacen y la empresa donde laboran, lo que afecta su productividad e incluso, puede orillarlos a renunciar, ¿cómo lidiar con ello?

Este estado se puede presentar por las condiciones de trabajo de la empresa, las cargas de trabajo, el ambiente laboral, poco reconocimiento, entre otras actitudes, aunque también se puede dar por el estrés vivido en el entorno, traslados de la casa a la oficina o problemas familiares. Sea cual sea la razón, la empresa debe detectar cuándo una persona pasa por esta situación y trabajar en remediarlo.

Lo primero a realizar es identificar quién atraviesa por ello, que usualmente se evidencia por los siguientes síntomas:

• Falta de iniciativa
• Llegar tarde
• Poca o nula concentración
• Quejas continuas de todo alrededor
• No ser participativo
• Baja productividad
• Poco interés por lo que ocurra
• Sentirse enojado o desesperado

Si la empresa detecta que hay uno o más colaboradores atravesando esta sintomatología, el primer paso del plan es conocer las causas del cambio de ánimo, ¿es un problema familiar o personal?, ¿la empresa es responsable?, ¿qué necesita para sentirse mejor?

Una vez identificadas las causas, hay que implementar una estrategia de acción. Si bien las causas pueden ser muy particulares, hay algunas iniciativas generales que influyen en el mejoramiento de las personas, independientemente cuál sea el problema. Algunas de ellas, de acuerdo con UKG son las siguientes tres:

Enfoque en la salud mental

En los últimos años, los índices de estrés, ansiedad y depresión incrementaron por la pandemia y el cambio de la forma de trabajo, así como el aislamiento. Esto también influye en el desánimo de los colaboradores así como en su calidad de vida, por lo que la organización debe enfocarse en el cuidado.

Se pueden implementar programas de meditación, descanso, construcción de relaciones sanas, flexibilidad, actividades que favorezcan el bienestar, entre otros opciones.

Prevenir el síndrome de burnout

Algo muy común es que los empleados se fastidien o desanimen por estar cansados a causa de todo lo que realizan en el trabajo, al grado de sentirse “quemados”, lo que se conoce como síndrome de burnout.

Dicho padecimiento se presenta cuando hay sobrecargas de trabajo, pocos o nulos descansos, jornadas largas, presión constante e intromisiones en la vida personal aun fuera de los horarios de trabajo.

La responsabilidad de las empresas es gestionar políticas para respetar horarios, no abusar de las tareas a realizar, otorgar recompensas y tener un sentido humano con las personas, algo que parece básico pero que muchas veces se olvida. Evitar malas prácticas evitará daños en los colaboradores.

Ser más flexible

Sentirse atado a un horario, oficina o tareas sin posibilidad de negociarlo o tener un modelo flexible, también provoca fastidio en las personas por sentir que no tienen libertad o empatía.