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Los básicos del marketing digital para restaurantes
Del contenido viral que existe, la comida representa 42%, por lo que hay que saber cómo anunciarla
La generación foodie tiene hambre: los millennials son conocidos como la generación de las experiencias, la revolución digital y por su particular relación con la comida.
Para ellos, el acto de comer va más allá de sentarse en una mesa. Esta generación pone especial atención en el consumo consciente de alimentos, en el origen y tratamiento de los productos y las relaciones laborales de los empleados. Además, busca experiencias y sabores extraordinarios en cada bocado.
Todo esto crea la tormenta perfecta para el boom de los contenidos gastronómicos que hoy nos envuelven: desde series documentales sobre chefs con estrellas Michelin, hasta las 300 millones de fotografías etiquetadas con el hashtag #food que hay en Instagram, además de los miles de videotutoriales de recetas y reseñas que se suben a Internet cada minuto.
Según el departamento de Market Intelligence de Mero Mole, ocho de cada 10 comensales buscan los restaurantes antes de su primera visita, esto con el fin de encontrar platillos, precios y reseñas, así como la búsqueda obligada para encontrar la dirección.
De todo el contenido viral que existe, la comida representa aproximadamente 42 por ciento: ¡Casi la mitad! Esto representa una oportunidad para restauranteros y marcas de la industria para capitalizar conversaciones y tendencias con el fin de conectar con sus consumidores.
Si no te has convencido o no sabes bien por dónde empezar, te dejamos algunos consejos que te pueden ayudar:
1. Define quién eres y demuéstralo
Tus canales digitales son una forma de atraer clientes potenciales y de generar relaciones a largo plazo con clientes existentes. Las fotografías, imágenes, textos y videos que subas deben reflejar la experiencia del restaurante, desde la comida hasta el espacio físico.
Un excelente ejemplo de esto es The Secret Donut Society, que además de cautivarnos con su speakeasy de postres deliciosos, se están coronando en Instagram como los absolutos reyes del food porn.
2. Presume lo que te hace único
Si tu local tiene experience points únicos —diferenciadores en la experiencia que llevan el storytelling al espacio físico del restaurante— o tienes algún plato héroe que sea el favorito de tus clientes, utilízalos como generadores de conversación.
Pero, ojo, aunque se vale hacer producciones especiales para las fotos y los videos, debes procurar que las presentaciones y los lugares sean iguales que en el restaurante. Prometer o mostrar cosas que no existen o son muy distintas a la realidad puede generar opiniones negativas con respecto a tu marca.
Niddo, el restaurante de Eduardo Plaschinski, es el ejemplo perfecto de storytelling digital, cada fotografía es una invitación a la indulgencia o a jugar con su espacio de forma poco convencional.
3. Escoge tus canales y sé relevante
Estar en la mente del consumidor en el momento indicado es fundamental, toda comunicación se hace para generar conexión e identificación con tu mercado meta.
El universo digital es enorme, no tienes que conquistarlo todo al mismo tiempo y lo más importante: no tienes que conquistarlo todo. Escoge los canales y formatos que te ayuden a lograr tus objetivos. Por ejemplo, si lo que necesitas buscar es tener mayor control sobre tus reservaciones, deberías de considerar Open Table como uno de tus canales, si lo que necesitas es conocer la opinión de tus clientes, tal vez Foursquare, Google o Tripadvisor sean mejor opción.
Si no sabes con qué red empezar, te recomendamos que intentes con Instagram, es muy sencilla de usar y cuenta con herramientas de edición de fotografía y videos integradas para mejorar la calidad de tus imágenes.
4. El community management lo es todo
Si una persona se toma el tiempo para hablar contigo, haz el esfuerzo de contestarle en el menor tiempo posible.
No es suficiente prender tus canales y subir contenido, dedícale tiempo a contestar las menciones, preguntas y comentarios que tengan tus comensales. Si no tienes tiempo para hacerlo, es mejor no tener una presencia digital activa.
5. Lo que no se mide no se puede mejorar
Plantea tus objetivos a largo plazo y define los indicadores con los que vas a medirlos. Escucha y cuestiona constantemente, ¿cuáles son los contenidos con mejores resultados? ¿Qué diferencia hay entre la audiencia de un canal y de otro? ¿En qué días obtienes mejores resultados? Ten la apertura para hacer ajustes sobre tu plan inicial y modifica lo que sea necesario para ser siempre relevante.