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Mal timing en puesta de regalías
De bajar los precios de los metales, un nuevo gravamen podría inhibir el desarrollo de proyectos costosos.
Pese a que la imposición de regalías al sector minero mexicano va en línea con la práctica usual internacional, su fijación en un contexto de baja sistemática de precios de los metales podría restar atractivo al desarrollo de nuevos proyectos con costos de producción altos, indicó la consultora estadounidense Stratfor.
Y es que en el periodo de sesiones que concluyó el pasado 30 de abril en la Cámara de Diputados se aprobó la fijación de una regalía de 5% sobre las ganancias antes de impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) de las empresas mineras, aunque dicho gravamen tiene que ser ratificado todavía por el Senado.
La firma de análisis indicó que existen proyectos en el país cuyos altos costos de producción obligan a tener un precio de venta de producto alto, pues de otra manera no resulta rentable su explotación.
Por ejemplo, en la mina de El Gallo, en Sinaloa, producir una onza de oro cuesta de 1,200 a 1,325 dólares; con precios por onza alrededor de 1,500 dólares, si el precio del oro se estanca o cae, nuevos proyectos como ésos con márgenes de ganancia más estrechos no serán iniciados , estableció.
No obstante, reconoció que la aprobación del gravamen responde a la necesidad del país de diversificar sus fuentes de ingresos fiscales para depender menos de los ingresos petroleros, así como de distribuir los beneficios mineros en las comunidades en los que los proyectos toman lugar.
La regalía minera propuesta en México no alterará en lo fundamental la dirección de la industria -ésta continuará siendo amigable a la inversión-, pero ésta intenta trasladar más de los beneficios del crecimiento del sector al gobierno, idealmente, a aquellos directamente afectados por las actividades mineras , estableció.
De los más de 5,000 millones de pesos que se espera que se recauden con el gravamen propuesto, 30% será retenido por la Federación, mientras que 70% restante se transferirá a los estados y municipios con actividad de minas.
No obstante, el impuesto entró en un impasse al término del periodo de sesiones pasado en el Congreso, pues la fracción panista en la Cámara de Diputados se pronunció en contra de aprobarlo de manera aislada; es decir, no dentro del marco de una reforma fiscal integral, cuya discusión se espera para el segundo semestre del año.
El problema con el que México tendrá que lidiar es con uno de timing. Imponer regalías en el momento cuando los precios de los metales preciosos están en declive podría mermar los prospectos de crecimiento de la industria , concluyó Stratfor.