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Participaciones federales siguieron a la baja en julio
Coparmex Querétaro insta a que el gasto federal se centre en atender los efectos de la emergencia sanitaria de Covid-19.
Querétaro, Qro. Las finanzas públicas estatales mostraron un deterioro en la recepción de participaciones federales durante los primeros siete meses del año.
En el periodo enero-julio las participaciones federales cayeron 9.0%, en términos reales, llegando a 519,494.4 millones en el mismo periodo del 2020, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En total, 31 entidades mostraron una caída respecto al 2019; la excepción fue Colima con un alza de 6.9 por ciento.
Las disminuciones más pronunciadas se dieron en Campeche (-18.5%), Hidalgo (-14.0%), Morelos (-13.7%), Guanajuato (-13.7%), Puebla (-13.4%), Nayarit (-12.2%), Tabasco (-11.4%) y Coahuila (-11.3 por ciento).
En julio, las participaciones registraron un descenso anual de 12,073 millones de pesos (menos recursos para estados y municipios), en junio la reducción fue de 30,566 millones y en mayo, la baja ascendió a 17,279 millones, es decir, el denominado Ramo 28 continuó desplomándose en el séptimo mes del año.
En el periodo enero-julio, la variación a la baja ha sido de 9.8%, entre el monto calendarizado y el pagado en el año en curso, según el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP).
Estas bajas dan referencia del impacto de la pandemia de Covid-19 en las participaciones que reciben los estados, a causa de la caída en la recaudación de impuestos, expuso la presidenta de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Querétaro, Lorena Jiménez Salcedo.
“Es el deterioro de las finanzas públicas (...) Es un semáforo que va desde los estados en color verde hasta el rojo, pero prácticamente todo el país tiene un daño en las finanzas públicas”, expuso.
Prioridades
En este contexto, la representante de Coparmex Querétaro instó a que el gasto federal se centre en atender los efectos de la emergencia sanitaria por la pandemia, tanto en materia sanitaria como económica.
“El llamado es que todavía estamos a tiempo de rectificar, hay obras enormes que consideramos que la situación que vive el país demanda distintas acciones y que el dinero se inyecte en otras cosas. Las empresas piden apoyo para poder subsistir, para poder preservar el empleo y que no caiga, como están cayendo ya millones de mexicanos en pobreza estructural”, declaró.
A este entorno, agregó, se suma la caída que ha tenido la actividad económica del país y de cada uno de los estados a causa de los efectos de la pandemia, tras la caída de 18.9% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional en el segundo trimestre del año. Estos factores incidirán en indicadores de desempleo y de informalidad.
“Aún es tiempo de rectificar el rumbo de la economía de nuestro país, seguimos con el camino que hasta ahora se está haciendo que es un nulo apoyo para las empresas, un hostigamiento muy fuerte, no le veo un cambio. Esto habla de mayor desempleo, informalidad y deterioro en la parte social”, destacó.
Jiménez Salcedo refirió que aún es tiempo de hacer un ajuste en las políticas públicas y en la distribución de recursos públicos, para priorizar los daños derivados de la contingencia sanitaria.