Lectura 3:00 min
Cameron suplica a escoceses preservar la unión británica
El primer ministro y los líderes británicos desembarcaron este miércoles en Escocia para pedir un "no" a la independencia e impedir que su nombre quede asociado a una catástrofe histórica para el Reino Unido.
Londres. El primer ministro británico, David Cameron, hizo una súplica apasionada para mantener a Escocia en Gran Bretaña e instó a los electores a no votar por la independencia.
Su intervención se produce una semana antes de que los escoceses voten para decidir si romperán su unión con el Reino Unido. Podría decirse que intentó hacer lo que debió haber hecho desde hace tiempo: conectar emocionalmente con los escoceses.
Luego de que las encuestas publicadas este fin de semana mostraron que el resultado fue muy reñido, los líderes de los principales partidos políticos británicos acordaron abandonar las preguntas al primer ministro para hacer una campaña de emergencia al norte de la frontera.
Cameron, con los ojos vidriosos, emocional, urgió a los votantes escoceses a permanecer en su territorio, ya que si los escoceses decidieran continuar por su cuenta le dejarían el corazón roto . El primer ministro británico expresó: Ésta no es una decisión para los próximos cinco años, marcará el próximo siglo .
El primer ministro hizo hincapié en la historia común de su unión, diciendo que eran una familia de naciones que derrotaron juntas a Hitler, abolieron la esclavitud y ayudaron a construir el Servicio Nacional de Salud. Reiteró que si Escocia se independiza, no podrá utilizar la libra.
Alex Salmond, primer ministro escocés, enmarcó la campaña de como equipo de Escocia frente al equipo de Westminster .
Lo que estamos viendo al otro lado es al equipo de Westminster frente al equipo de Escocia, pues se percibe el pánico por las elecciones , dijo.
Es una apuesta para Cameron, quien podría dimitir de su cargo si Escocia favorece el sí a la independencia (aunque él insiste en que no renunciará y que sería responsable de la negociación).
Cameron admitió que su partido no goza de mucha popularidad en Escocia, pero dijo: Amo más a mi país que a mi partido .
Si Escocia se queda o se va, habrá muchos cambios después del 18 de septiembre. Por ejemplo, si los escoceses rechazan la independencia, los tres principales partidos de Westminster prometieron nuevos poderes para descentralizar el gobierno de Escocia. Si votan en favor de ella, comenzarán las negociaciones, desde la repartición de deudas y activos, hasta los submarinos nucleares de Gran Bretaña.
A medida que el referéndum se acerca, los ex primeros ministros británicos Gordon Brown y John Major también se manifiestan en pro de la unión británica.
Major escribió para el Times of London: Nos necesitamos unos a otros y si nos separamos, todos nos enfrentaremos a un cambio inoportuno e inesperado .