Grecia prohíbe las fiestas públicas de Navidad y Año Nuevo para frenar la propagación de la variante Ómicron

Grecia prohibió las fiestas públicas de Navidad y Año Nuevo y obligó a llevar cubrebocas en los espacios abiertos para contribuir a frenar la propagación de la variante Ómicron del coronavirus, afirmó el jueves su ministro de Sanidad.

Las medidas entrarán en vigor el viernes por la mañana y obligarán también a los ciudadanos a llevar dos cubrebocas o una de alta protección en el transporte público y en supermercados. A los visitantes extranjeros se les "recomienda encarecidamente" que se hagan dos pruebas de PCR unos días después de su llegada.

El ministro de Sanidad, Thanos Plevris, dijo que se esperan medidas adicionales en el año nuevo, sobre todo en los espectáculos y eventos deportivos, para evitar otro cierre.

"Estamos vigilando constantemente los casos para ver si detrás de la variante delta hay una propagación de Ómicron", dijo en una conferencia de prensa. Grecia ha notificado solo unas pocas decenas de casos de Ómicron desde principios de mes.

A pocos días de la segunda Navidad de la pandemia, muchos países han impuesto nuevas restricciones a sus ciudadanos, al tiempo que se preocupan por el daño que la nueva variante pueda infligir a sus economías.

Grecia, que salió de la primera oleada de la pandemia el año pasado en relativa mejor forma que otros países europeos, ha estado lidiando con un aumento de las infecciones en los últimos meses que han puesto a prueba su sistema sanitario.

Las autoridades informaron el miércoles de 5,641 nuevas infecciones y 69 muertes relacionadas, lo que eleva el número total de infecciones desde que comenzó la pandemia a 1 millón 049,936 y el número de decesos a 20,126.

Con una población de 11 millones de personas, Grecia ha administrado hasta ahora más de 7.3 millones de primeras vacunas. Alrededor del 65.7% de los griegos están totalmente vacunados.