Lectura 3:00 min
Teléfono averiado; Maduro y su daga
El estadounidense revela supuesta llamada del mexicano, y el venezolano se enarbola la bandera mexicana para atacar a Trump.
La dinámica geopolítica continental se ha polarizado con la llegada de Trump a la presidencia y la mutación autoritaria de Nicolás Maduro.
En lapso de pocas horas, sucedió una triangulación de mensajes, aclaraciones y frustraciones entre los mandatarios de Estados Unidos, México y Venezuela.
Durante el evento privado en el que John Kelly juramentó como el nuevo jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Trump destacó la labor positiva del militar en materia de seguridad nacional al reducir en 80% el flujo migratorio a través de la frontera con México.
Hasta el presidente de México me llamó y dijo que muy poca gente está pasando por su frontera sur porque saben que no van a pasar por nuestra frontera y ese es el mejor cumplido de todos , dijo el mandatario.
Sin embargo, la Cancillería mexicana matizó sobre el tema.
En primera instancia la nota informativa revela que el presidente Peña Nieto no ha sostenido recientemente comunicación telefónica con el presidente Trump.
Lo que sí confirmó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) es el tema que compartieron ambos mandatarios en su reciente encuentro en Hamburgo, el pasado 7 de julio en el marco de la reunión del G20.
El presidente mexicano le comentó a Trump que las repatriaciones de ciudadanos mexicanos desde Estados Unidos disminuyeron 31% (para el periodo de enero a junio del 2017, comparado con el mismo lapso del año anterior) y que durante el mismo semestre la migración hacia México proveniente de Centro y Sudamérica ha disminuido alrededor de 47%, en su comparación anual .
La SRE tuvo que emitir la nota informativa para diluir una nebulosa instalada en redes sociales sobre el tipo de relación bilateral.
Tumbar el muro
Nicolás Maduro no desperdició el tema de las sanciones que el gobierno de Estados Unidos anunció en contra de su persona para construir su línea defensiva a través de la retórica victimista. Pero, algo más, dedicó pólvora al arquetipo que detona el mal humor entre mexicanos: el muro.
¿Por qué se me sanciona? Porque no obedezco órdenes de gobiernos extranjeros; porque no muevo la colita y no soy un perro echado. ¿Por qué se me sanciona? Porque soy capaz de decir las verdades de la persecución contra los pueblos mexicano y latinoamericanos por parte del gobierno Donald Trump. (...) ¿Por qué se me sanciona? Porque denuncio el muro inferna, y si yo fuera presidente de México me fuera a ponerle coto y paro a ese muro (...) Si yo fuera presidente de México yo fuera con una mandarria y no permitiría la construcción de ese muro. Por eso se me sanciona .
En un ejercicio de pregunta y respuesta a través de un monólogo, Maduro se enarboló con la bandera mexicana para defender al país. Yo voy a continuar defendiendo la democracia de Venezuela (...) los derechos de México . Maduro lo hizo otra vez. Tocar la parte sensible del mexicano, el nacionalismo.
El discurso de Maduro ocurrió en las instalaciones del Consejo Electoral Venezolano al que acudió para recibir una constancia de resultados preliminares de las elecciones constituyentes.
La triangulación de mensajes es parte del dinamismo diplomático que exige la globalización.