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Homicidio culposo aqueja a Michoacán
A los michoacanos no sólo los aqueja el problema del narcotráfico, sino que el estado está entre los primeros 10 lugares en cuanto a incidencia de delitos como robo, secuestro, homicidio, por mencionar algunos.
A los michoacanos no sólo los aqueja el problema del narcotráfico, sino que el estado está entre los primeros 10 lugares en cuanto a incidencia de delitos como robo, secuestro, homicidio, por mencionar algunos.
La entidad purépecha ocupa el segundo lugar en denuncias por homicidios culposos; el cuarto en secuestro; el sexto en homicidios dolosos; octavo lugar en robo de vehículo y noveno lugar en extorsión.
Por su parte, el Observatorio Nacional Ciudadano refiere que del 2012 al 2013, Michoacán ha experimentado un aumento de 32.8% en la tasa de denuncias por secuestro.
Cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública indican que en Michoacán, de enero a noviembre del 2013, hubo un total de 2,368 denuncias por homicidios, de las cuales 862 son dolosos y 1,506, culposos; además, 15,686 robos con y sin violencia; 3,376 lesiones; 4,498 delitos patrimoniales y 179 secuestros.
Francisco Rivas, director general del Observatorio Nacional Ciudadano, habla sobre la situación que prevalece en Michoacán, y refiere que la violencia no está desbordada en toda la entidad, pero para que funcione la solución se debe aplicar en toda la región.
Hace un par de meses, las autoridades federales tomaron el control del Puerto Lázaro Cárdenas, zona estratégica para el grupo criminal denominado Los Caballeros Templarios. Sin embargo, ha dejado de lado varios municipios azotados por la violencia, como Apatzingán, Los Reyes, entre otros, en donde los criminales mantienen el control y los pobladores son sometidos a las extorsiones.
De acuerdo con las autoridades estatales, el gobierno de Michoacán, en coordinación con los municipios y la Federación, preparan una revisión de la estrategia de seguridad; ello, tras los constantes bloqueos y enfrentamientos entre grupos criminales y las autodefensas.
veronica.macias@eleconomista.mx