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La incertidumbre pega en la UAM
El paro ha retrasado las clases e impedido el avance de trámites y entrega de becas.
A dos meses de la huelga del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM), que ha detenido las clases y actividades de esa casa de estudios, la comunidad universitaria asegura que las consecuencias negativas de este paro de labores además de retrasar las clases, ha impedido el avance de trámites de titulación y entrega de becas.
“Creo que sí nos ha afectado a muchos de nosotros, principalmente a los estudiantes y académicos, precisamente porque hay incertidumbre (de) si perdemos o no el trimestre, porque realmente no sabemos la fecha clara de cuándo van a abrir las instalaciones de la universidad, pero lo que sí se sabe es que nos hemos atrasado en las clases, e investigaciones”, dijo Edgar Reyes, estudiante de noveno trimestre de Comunicación Social de la UAM Xochimilco.
Además, el universitario manifestó que en su caso también se detuvieron los trámites para recibir un apoyo económico que se otorga en su localidad.
“En mi caso, para solicitar la beca Jóvenes Universitarios del municipio de Texcoco, yo ya perdí ese trámite porque no tengo las constancias de estudios, por cierto este apoyo económico me ayuda a continuar con mis estudios; perderlos no me imposibilita, pero son necesarios”.
Reconoció que la huelga se debe a que los trabajadores de la UAM exigen mejores condiciones laborales, sin embargo, consideró que están buscando sus propios intereses más que los de la comunidad universitaria.
Por su parte, una fuente de la UAM aseguró que también el no saber qué sucederá con las becas que otorga el Conacyt causa incertidumbre en los beneficiarios de estos apoyos económicos.
“Tengo compañeros que reciben la beca de maestría del Conacyt, ellos requieren una firma de su asesor de la tesis o coordinación de posgrados cada trimestre, porque es lo que presentan al Conacyt, si no se tiene esa firma se quita todo el apoyo, entonces la gente tiene miedo de que como no tienen forma de ver a los maestros para que firmen o den una calificación que sustente ante Conacyt, muchas becas seguramente se van a perder”, narró la fuente.
Aseguró que los alumnos quieren tener clases para no perder el trimestre e incluso hay disposición de realizar trabajos que no impliquen la entrada a las aulas.
“Yo estoy casi seguro de que si la huelga se extiende más tiempo va a tener que haber un diálogo más fuerte porque tendrán que interrumpir el progreso de las personas que hacen trabajos de investigación en México y eso no le conviene al país, ni a la escuela, porque la UAM desde sus inicios ha tenido profesores altamente calificados”, defendió.
Recordó que una semana antes de que estallara la huelga, hubo paros de labores en la UAM Iztapalapa para ejercer presión; no hubo servicio de librería, muy pocos servicios de biblioteca y no hubo servicio de limpieza.
“Las personas ya estaban ahí, cerraron todo, se dedicaron a poner pancartas, es excesivo que el sindicato se agarre de la huelga como un medio de presión porque año con año sabemos que en febrero puede haber una huelga, porque piden cosas diferentes”, expuso la fuente anónima.
Finalmente, Zaira Gónzalez, egresada de la carrera de Psicología Social de la UAM Iztapalapa, afirmó que tras concluir su plan de estudios en septiembre del año pasado, y al realizar su servicio social, no tenía todos los documentos que necesitaba para concluir los trámites que avalaran el término de sus estudios.