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Ruptura en México Unido Contra la Delincuencia
Eduardo Gallo, ahora expresidente de la organización, anunció su salida junto con la mitad de los consejeros para conformar otra que vea por delitos que sufren no sólo los ricos .
Debido a los grupos de poder que privilegiaron el interés económico al compromiso social y opacidad en manejo de recursos donados a México Unido contra la Delincuencia (MUCD), Eduardo Gallo y Tello motivó su salida de ese organismo junto con 50% de los consejeros y anunció la formación, próximamente, de otro organismo que vea por delitos que afectan no sólo a los ricos, sino a los desamparados, quienes son los que más padecen la criminalidad .
En conferencia de prensa y para aclarar la serie de rumores que se han propagado, el expresidente del MUCD, quién asumió el cargo el 15 de julio del 2010, dijo que lo abandonó junto con los consejeros Gabriel Delgado Ballesteros, Alfredo Herrera, Hugo Camoú, Eduardo Gallo D., Alberto Athié, Alicia E. Pérez Duarte, Eduardo Garza y José Rodrigo González por esas razones.
La salida del organismo pionero en la lucha social y principalmente contra el delito del secuestro, Eduardo Gallo la fundamentó junto con sus compañeros en diferencias fundamentales irreconciliables entre nuestros principios y los que encontramos en el interior de la organización .
Más adelante, en la sesión de preguntas y respuestas, El Economista cuestionó:
¿Las organizaciones civiles y sociales perdieron la crítica y se han gubernamentalizado?
Nada más vean los discursos que últimamente han emitido y no me lo preguntes a mí .
Recordó que tuvo diferencias con los consejeros que ahora dirigen el MUCD, porque no está de acuerdo con la estrategia anticrimen que aplica el Estado y en los casos de la francesa Florence Cassez y Jacinta, me dijeron que eso podría ir contra las donaciones oficiales y podría ser mal visto por el Estado .
Cuestiones por las que recibí amenazas a mi integridad física... . No abundó más.
Otro motivo que molestó a los que se quedaron en el MUCD fue que se les demandó falta de transparencia y rendición de cuentas para que fuera auditada y dejar claro la parte que me correspondía presidir, lo que nunca ocurrió e incluso los archivos estaban en una bodega ajena al organismo , aseguró.
Agregó que nunca se hizo entrega-recepción de la pasada administración, no se explicó el estado de un contrato-donativo por 4 millones de pesos, que dejaba ganancias de más de 40% sobre gastos de un proyecto, tampoco por qué a tres días de que yo entrara en funciones se otorgó un contrato por 400,000 pesos a un exconsejero para presentar 100 obras de teatro guiñol en la Central de Abastos.
No se justificó una nómina laboral de 300,000 pesos mensuales, cuando sólo se recibían 75,000 pesos mensuales de donativos y subcontratos a 100% a terceros en el 2008 y el 2009 , ante la opacidad y falta de respuesta decidimos renunciar, empero, aseveró que no está acusando de malos manejos, sino de falta de transparencia , concluyó.
El luchador social, cuya hija universitaria Paola Gallo fue secuestrada y asesinada en Tepoztlán en julio del 2000, a pesar de que el dinero se había entregado al secuestrador. A la fecha, el tema no le fue aclarado, pues los secuestradores de su hija fueron asesinados cuando llevaban el dinero del rescate sin que éste les fuera robado.
En medio de este caos, el resto de la banda, que se mantenía al cuidado de Paola mientras se cobraba el rescate, la asesinó y huyó.
Eduardo Gallo se volvió su propio investigador cuando se dedicó a buscar y atrapar a los secuestradores. Desde entonces se ha buscado influir en las medidas contra el secuestro.
rtorres@eleconomista.com.mx