Conacyt profundiza diferencias con la comunidad científica

Luego de que la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación fuera aprobada durante una atropellada sesión en fast track el sábado por la madrugada con votos de senadores de Morena y sus aliados, por primera vez apareció en público la directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez Buylla.

Se pensaba que la directora contestaría a los miles de cuestionamientos que investigadores y académicos han hecho en contra de esta ley, pues incluso durante los únicos dos foros de Parlamento Abierto que se realizaron en la Cámara de Diputados nunca estuvo presente, a pesar de ser la principal promovente de la iniciativa de ley.

Sin embargo, su presentación este miércoles durante la conferencia matutina del presidente, Andrés Manuel López Obrador estuvo lejos de dar respuesta y sustento a la nueva ley. Lo que presentó la directora del Conacyt fue una acostumbrada serie de ataques hacia las instituciones, las administraciones pasadas y algunos personajes de la vida científica.

Por ejemplo, hablo de los fideicomisos, que nacieron en el sexenio del ex presidente Vicente Fox y que según sus datos, fueron administrados de manera “opaca y ajena al Conacyt”, dijo que se transfirieron más 45 mil millones de pesos a casi 3,000 empresas y trasnacionales, con “complicidad para habilitar y legitimar estas transferencias con instituciones de educación superior públicas y privadas”. Aseguró que se dejaron sin atender prioridades estatales y se destinaron alrededor de 14 mil millones de pesos para “elefantes blancos y falsas ciudades del conocimiento”, además señaló a la Rednacecyt A.C. como facilitadora de estos proyectos.

Luego se refirió al Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) como una institución de “intereses creados políticos” y presentó una “radiografía de las redes que habilitó el Centro de Investigación en su época neoliberal”, acusó a la institución de desviar sus funciones.

Responde el CIDE 

Sobre este tema, la Asamblea Académica Permanente del CIDE respondió inmediatamente con un comunicado en el que rechazan rotundamente que se estigmatice el trabajo de los profesores de un centro público de investigación. Además, expresaron su preocupación por estos mensajes de intimidación a su persona e institución en el ejercicio de sus derechos y libertades al expresar desacuerdos con la actual política de ciencia y tecnología.

También exigieron a la directora del Conacyt que cese el hostigamiento sistemático que ha promovido por la vía penal, administrativa y de comunicación social y en espacios como “la mañanera”. “Estas declaraciones son evidencia de que le incomoda el pensamiento crítico, la libertad académica y la participación de estudiantes y profesores en el desarrollo de la política pública”.

Luego Álvarez Buylla presentó en forma comparativa la manera en que ahora se distribuyen los recursos y aprovechó para dar a conocer que la vacuna Patria como refuerzo obtuvo resultados de fase final. “Los resultados son exitosos y con criterios establecidos por la Organización Mundial de la Salud”.

Esto sucedió en medio de un paro de estudiantes y maestros que al principio apelaba a que los senadores dieran una amplia discusión a la Ley de HCTI, luego de que esto no sucedió, pocas instituciones decidieron continuar con la manifestación, entre ellos el CIDE y la Facultad de Ingeniería de la UNAM. También este miércoles 3 de mayo se publicó la petición en Change.org denominada Rechazo al Proceso de Aprobación de la Ley de HCTI.

Este documento asegura que el proceso completo en las cuales se ha aprobado la iniciativa de ley, ha estado plagado de irregularidades. “A pesar de los incontables esfuerzos, sugerencias y críticas constructivas por parte de la comunidad científica a lo largo de 4 años, la iniciativa de Ley de HCTI solo contiene algunos de los cambios sugeridos en los parlamentos inconclusos y sigue conteniendo fallas y errores que generan incertidumbre legal y ponen en riesgo el presente y futuro de la ciencia en el país”, se lee.