Aprendizaje práctico en las empresas, la vía para desarrollar al talento del futuro

Se habla de una desconexión entre las escuelas y el mundo laboral real, pero ¿es lo que sucede o será el trabajo el lugar donde realmente está el poder del aprendizaje? La transición de la escuela a las empresas representa un desafío significativo para los recién graduados.

El estudio El poder del aprendizaje en el trabajo, realizado por la consultora Metaverse, refiere que los jóvenes profesionales tardan aproximadamente 11 meses en alcanzar su máxima efectividad en el puesto laboral.

Bajo esta visión, es fundamental entender que no sólo es importante el tiempo en el que los nuevos integrantes en las empresas se adaptan laboralmente, también plantea que el aprendizaje aplicado en el entorno de trabajo es clave para solucionar la escasez de habilidades más crítica en las organizaciones modernas.

“Ya sea ayudando a cerrar las brechas de habilidades más críticas, acelerando el crecimiento de futuros líderes o reconociendo el potencial que a menudo se pasa por alto, el aprendizaje aplicado emerge como una respuesta efectiva a los desafíos actuales”, se indica en el estudio.

Los resultados revelan que siete de cada 10 líderes empresariales consideran que el aprendizaje en el lugar de trabajo es la mejor manera de desarrollar las habilidades más demandadas del futuro, que incluyen la comunicación efectiva, el pensamiento crítico, el liderazgo, la creatividad y la adaptabilidad.

Hace unos días, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), a través de los resultados de la última prueba PISA, evidenció que sólo 13.8% de los estudiantes de educación básica en México alcanzaron el nivel de alto rendimiento en las evaluaciones de pensamiento creativo, una de las competencias más demandadas en el mercado laboral.

Esto significa, que uno de cada 10 demostró capacidad para generar, evaluar, resolver e innovar en escenarios complejos científicos y sociales. Es decir, pensar “fuera de la caja”.

Necesaria la conexión entre escuelas y empresas

En el estudio de Metaverse, 67% de los líderes empresariales expresó preocupaciones sobre la capacidad del sistema educativo para desarrollar las habilidades técnicas y tecnológicas que serán fundamentales en el futuro laboral, pese a los avances en educación superior.

Por eso, se hace énfasis en el aprendizaje en el trabajo, que podría llenar un vacío crucial en la preparación de los graduados para el mercado laboral actual y futuro.

También es importante considerar la posición de los líderes empresariales ante las competencias duraderas contra los logros académicos, éstos prefieren las primeras al evaluar a los candidatos para puestos de nivel inicial.

Bajo esta perspectiva es fundamental que las llamadas habilidades blandas se incorporen a los programas educativos y de desarrollo profesional, por ejemplo, la comunicación efectiva, el pensamiento crítico o la capacidad de adaptación, ya que son fundamentales para el éxito en cualquier rol profesional, dice el estudio.

En ese sentido, el Foro Económico Mundial (WEF) advierte que las escuelas y universidades siguen enseñando planes de estudio que se centran más en el conocimiento que en las habilidades.

Mientras que las empresas exigen competencias como la capacidad de utilizar inteligencia artificial, desarrollar software y gestionar bases de datos.

Las habilidades son oro en las organizaciones

La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos refiere que el pensamiento creativo es una herramienta positiva porque es un estímulo para el aprendizaje. Además, impulsa la absorción del conocimiento, el desarrollo de competencias laborales e incluso el bienestar emocional.

Existe, señala la OCDE, una correlación importante entre los sistemas de alto rendimiento académico y el desarrollo de habilidades de creatividad y análisis: los estudiantes con mejores notas en matemáticas, ciencias y comprensión lectora también tienen más habilidades de pensamiento creativo.

Finalmente, el estudio concluye que las competencias más valiosas se adquieren en el trabajo, de hecho, los líderes atribuyen gran parte de su éxito a éste: 58% cree que desarrolló sus habilidades más críticas en la práctica laboral.

El aprendizaje práctico y las habilidades duraderas permitirán a los jóvenes contribuir para que las organizaciones estén mejor preparadas para enfrentar los desafíos de un mundo en constante evolución, finaliza el estudio.