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“El futbolista debe saber qué firma”
Uno de los primeros pasos es que el jugador se haga responsable de sus actos; se le protegerá y también el nuevo organismo se compromete a ser una institución transparente para sus afiliados.
Durante este año, Álvaro Ortiz viajó a Holanda al primer congreso del futbol femenino; estuvo en España compartiendo experiencias con los dirigentes de la Asociación de Futbolistas del país ibérico y de la Agremiación de Futbolistas de Perú; también concluyó sus estudios en el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresas y en diciembre próximo asistirá a El Cairo, Egipto, para conocer la respuesta de la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales sobre la afiliación de la Asociación Mexicana de Futbolistas como miembro pleno con derechos.
“No necesitas tener una figura de sindicato para poder pelear los derechos que te corresponden”, expresó Álvaro Ortiz, director operativo de la Asociación Mexicana de Futbolistas profesionales, en entrevista con El Economista.
El exjugador de América, San Luis, Puebla, Necaxa, entre otros, indica que el proyecto de la asociación les tomó cinco años, que escogieron la figura jurídica de asociación civil porque es el “traje a la medida”, para el futbol mexicano y que es más importante que los jugadores tomen conciencia de sus derechos, obligaciones y conciliar sus problemáticas con los directivos, antes de pensar en contratos colectivos, salarios mínimos, huelgas... “hay un proceso de muchos años”, señaló.
La primera Asamblea de la Asociación Mexicana de Futbolistas se realizará en enero del 2018 y en ella pondrán a discusión la inclusión de cuota para el financiamiento del organismo, informarán sobre los mecanismos de transparencia y rendición de cuentas y se incluirá entre los objetivos prioritarios el pago de derechos de imagen a los futbolistas.
—¿Por qué elegir la figura jurídica de asociación civil sobre un sindicato, o retomar los proyectos que se hicieron en años pasados?
—Tenemos cinco años investigando y trabajando cómo podíamos darle valor agregado a todo lo que se venía haciendo. Hicimos esta asociación porque la ley del deporte te la permite, hicimos una asociación deportiva-laboral, no una asociación laboral-deportiva.
Tener una asociación no significa que no podamos pelear los derechos laborales, lo que hicimos fue primero pensar en el deportista, no en un trabajador de una empresa que no es deportiva. Hicimos un traje a la medida.
Hablar de un sindicato, asociación, mutual, o el nombre que sea, si no tienes el apoyo de los afiliados, de los jugadores, no sirve absolutamente de nada, y la historia del futbol mexicano indica que es así, que nunca ha trascendido un proyecto del pasado.
—¿Tienen la facultad jurídica para negociar contratos colectivos, salarios mínimos, prestaciones para los futbolistas?
—Se habla mucho de un contrato colectivo, pero en España hace siete años —aproximadamente— fue que negociaron su contrato colectivo y la asociación de futbolistas cumplirá 40 años. Entonces, hay un proceso de muchos años, de trabajo y de concientizar al futbolista y se me hace injusto que se compare la Asociación Mexicana de Futbolistas con casos como Argentina, que lleva más de 60 años, o Inglaterra que son los más longevos y es el sindicato más fuerte que existe de futbolistas.
No podemos comparar y hacer cosas si ni siquiera estamos armados; es decir, no se puede decir que con la asociación no se puede pelear, claro que se puede hacer. No necesitas tener una figura de sindicato para poder pelear los derechos que te corresponden.
—Entonces, ¿cuáles serán los instrumentos de presión de la asociación? y, sobre todo, ¿cómo concientizar a los futbolistas de defender sus derechos?
—Hay un proceso y debemos armarnos bien, tenemos proyectos y queremos mesas de diálogo, tentativamente antes de que termine este mes debemos tener la primera reunión con autoridades de la Federación Mexicana y la Liga MX, en la cual expondremos esos puntos que tengamos que negociar. No es un “vamos a ver si ellos nos dan algo”, es vamos a poner los puntos para que tambíen se escuche la voz del futbolista. Nuestro lema es por una nueva cultura en el futbol.
La concientización es lo más importante en esto y visitamos a los clubes dos o tres veces al año, a los jugadores. Los retos diarios es que el futbolista sepa qué firma, que no tiene que firmar un doble contrato, que denuncie (...) Hay muchas cosas que debemos poner sobre la marcha. Yo nunca tuve una mesa de diálogo como futbolista con los dueños del futbol en 14 años de carrera.
—En años recientes organismos del futbol han sido acusados de corrupción, mal manejo de recursos, incluso sindicatos de jugadores han sido señalados, ¿utilizarán mecanismos de transparencia?
—En el acta constitutiva hay mecanismos de control; es decir, se hará un presupuesto anual y se presentará al comité de la asociación y todos los integrantes tendrán que firmar para su aprobación. También habrá un control de gastos, como un límite de hasta 100,000 pesos aprobado por el gerente y pasando esa cifra tendrán que firmar todo el comité.
También, habrá dos auditorías, una interna y otra externa con KPMG, y se entregarán al comité. Las nuevas generaciones tienen que seguir las mismas políticas para que sea transparente, porque el dinero no es de nosotros los directivos, sino de los jugadores y debe haber una transparencia. No haremos públicos los montos, pero sí se dará a conocer la auditoría a los afiliados, está dentro de los estatutos.
Todos los futbolistas tendrán la información de cuánto se gasta y cómo se gasta y los más importante es tener las auditorías externas e internas, que eso nos dará una claridad para todos y no dejar vicios para el futuro.
—¿Cómo será el modelo de financiamiento de la Asociación, contemplan un sistema de cuotas?
—Hay un fondo que se recabó durante varios años en la Comisión del Jugador y en la negociación con la Federación Mexicana de Futbol, el 1% de las transferencias de jugadores del mercado local deben ir a las cuentas de la asociación y se va a reglamentar.
Durante la primera asamblea se va a establecer si es necesario cobrar una cuota o sólo a los jugadores de Primera División. Hay muchos planes que están en el borrador, pero eso lo decidirán los jugadores, el comité directivo.
Hablar de cuotas, no lo tenemos pensado en este momento porque no necesitamos que el jugador ponga, la industria es tan buena y grande en México que nos ha dado para ahorrar un buen dinero y empezar a laborar.
—Diversos sindicatos en el mundo obtienen recursos de los derechos de imagen de los futbolistas, ¿en México tienen contemplado recurrir a esa herramienta?
—El jugador, cuando firma un contrato, regularmente cede los derechos de imagen para que el club lo pueda explotar en sus actividades, pero individualmente —no teniendo el uniforme del equipo— se puede negociar la imagen con quien quiera el futbolista. En el caso de México, los clubes lo ponen como parte del sueldo, pero no lo dan individualmente, y esa es una de las negociaciones que vamos hacer con la Liga, la Federación. Es una parte importante que se va a tocar en las mesas de diálogo y es una entrada muy buena para los proyectos que se van a hacer.