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En el peor momento, tenemos esperanza
En una época donde el tenis mexicano está en crisis, Santiago da la cara por el país y es motivo de inspiración.
¿Viste a ese gordo, cómo puede ser profesional? Por eso estamos así, ahorita se echan al mexicano en media hora, bultos, perdedores, mediocres.
Bienvenidos a la peor era del tenis mexicano. Bienvenidos a la era de nuestro mejor tenista mexicano de los últimos 20 años.
Santiago González, cuando tiene la oportunidad, viaja con su familia, le encanta salir retratado con sus hijos y siempre tiene una sonrisa para ellos. Su esposa es una mujer tranquila y lo apoya en todo momento, sin ella, dice el entorno del jugador, mucho de lo que es hoy quizá no existiría. Nuestra mejor raqueta tiene amor.
Sí, en el peor momento, en el peor de todos, siempre hay resquicio para un guiño a la esperanza.
¿Qué es esperanza? Es polvo de ladrillo color naranja, es Roland Garros, es el cumpleaños de su padre, son sus hijos viendo a un padre exitoso, es una esposa que sabe que han valido la pena las giras de dos meses sin verlo. Eso es esperanza. También es renunciar a un camino de singles para irse al de dobles. Santi sigue de pie.
Santiago está en el lobby del hotel Princess en Acapulco. Mira su teléfono, manda un mensaje y se va caminando hacia su habitación. Para ese entonces, ha recorrido casi todo el complejo y nadie se ha acercado a pedirle una foto o por lo menos un saludo o al menos darle las buenas tardes. Nada.
No es Rafael Nadal a quien todos persiguen. Fotos, selfies, sonrisas, gritos, suspiros. Nuestra estrella no acapara los micrófonos (no como ahora), es amable, le gusta cantar música mexicana, los cortes de carne, los dulces, pero, sobre todo, le gusta presumir a su familia.
Las estrellas no siempre son inaccesibles, intratables o inalcanzables. Es probable que si lees esto y has vivido o vives en Cuernavaca, Córdoba o has estado en el Abierto Mexicano de Tenis, quizá te lo hayas topado. Mira bien la foto, sí, es él.
¿No lo has saludado? Qué pena, ¿no crees...?
Santiago González, el mejor tenista mexicano de los últimos 20 años ha vivido en la peor crisis de este deporte en nuestro país y ha escuchado desde las tribunas, leído en diarios y blogs, programas de televisión y radio las críticas a los procesos y resultados del tenis mexicano. Pero es que además de él, no hay casi nada que presumir.
Me siento orgulloso de ser mexicano , dice Santiago apenas minutos después de terminar el partido. Dice que esta final la valora mucho más . Tiene 33 años y ser finalista de Roland Garros le permitirá tener más oportunidades de cerrar su carrera con patrocinadores. Ojalá esto ayude al tenis mexicano para captar patrocinadores .
Será su segunda final en París, la otra fue en 2012 en dobles mixtos y en el 2013 y 2014 fue finalista también en la misma categoría pero en el US Open.
Es verdad, tiene más de 1.5 millones de dólares en premios, pero tampoco es que pueda presumir de una vida deportiva con todas las comodidades, al menos no puedes decir eso cuando has pasado casi 10 años sin viajar con entrenadores.
Se necesitan más recursos y apoyos, por ejemplo, no tengo entrenador ahora , una frase que la dijo hace cuatro años en Acapulco, que repitió hace un año y que volvió a decir en Roland Garros. Poco ha cambiado.
Pero, ¿por qué es la peor era del tenis mexicano?... basta mirar el ranking de la ATP, apenas tenemos tres jugadores entre los primeros 1,000 del mundo y nuestra mejor raqueta es Manuel Sánchez de 26 años, número 615 del mundo. A nivel de naciones, México está en la tercera división (Grupo II de la Zona Americana), la última ocasión que estuvo a las puertas del Grupo Mundial fue en el 2006 cuando en el playoff del ascenso perdió 5-0 ante Austria, en aquella ocasión Santiago peleó en Pörtschach por hacer historia, pero perdió un partido de singles y otro de dobles.
Seis años después de aquella serie ante los austriacos, Santiago, que inició como profesional en el 2001, decidió retirarse de singles. El tiempo le dio la razón: 11 títulos y el sábado buscará uno más, pero el más importantes: un campeonato de Roland Garros.
Ojalá todo lo que he hecho, los resultados que he tenido, estén llevando a esto y motive a los mexicanos para que en un futuro estén más mexicanos en este tipo de torneos , dice.
Entonces, ¿de qué sirven los éxitos de Santi en la peor era del tenis mexicano?
Para ser sinceros, lo que ha hecho Santi poco ha ayudado para todo un deporte que vive en el ostracismo desde la década de los noventa del siglo pasado. Pero sí que ha inspirado a chicos que miran el tenis como un futuro.
Un ejemplo. A Demian Moreno le gustaría ser profesional, tiene 18 años y postea videos de Djokovic y llama a Roger Federer el mejor tenista de la historia . En alguna ocasión le dije: Cuando seas famoso, ¿me vas a dar una entrevista? . Y me tiró una sonrisa.
Pues este joven después del triunfo posteó en Facebook: Grande Santi . Un tenista mexicano en la peor era del tenis nacional inspirando, haciendo sentir orgulloso al prójimo. ¿Qué es esperanza? Es un poco de todo esto.
La final, ante pareja colombiana
Santiago González y el estadunidense Donald Young llegaron a la final del torneo Roland Garros, al vencer la dupla del español Fernando Verdasco y el serbio Nenad Zimonjic. Santiago, quien se encuentra en el puesto 70 dentro del ranking de dobles del Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), se convertirá en el tercer mexicano en jugar una final de dobles en un torneo de Grand Slam.
El mexicano disputará su segunda final en Roland Garros con un marcador de 6-7, 7-5 y 6-3 en 2 horas y 38 minutos de juego. González y Young se medirán en la final del ganador del duelo entre los colombianos Juan Sebastián Cabal y Robert Farah, ante la pareja formada por el estadunidense Ryan Harrison y el neozelandés Michael Venus.