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Tenemos una deuda con nuestra gente: Irarragorri

El directivo del club aceptó que deben superar a Monterrey en la final de la Concachampions y su afición ya merece un título internacional.

Las finales hay que jugarlas para ganarlas , sentenció Alejandro Irarragorri, presidente de Santos Laguna, quien charló con El Economista y aceptó que, a pesar de que el club al cual dirige ha hecho un gran papel al llegar a su sexta final en apenas tres años y medio, tienen una deuda pendiente con su afición: ganar un campeonato internacional, situación que buscarán alcanzar ante Monterrey, su rival en la final de la Liga de Campeones de la Concacaf.

Si bien el mandamás del conjunto de Torreón considera que la palabra obligación es muy fuerte, sí aceptó que ante Rayados tendrán que salir a ganar para asegurar su participación en Marruecos el próximo diciembre, luego de que el año pasado, Monterrey los dejara fuera del Mundial de Clubes, conjunto con el cual tendrán una revancha inmediata.

Las finales hay que jugarlas para ganarlas. El haber llegado es un mérito importante, pero el ganarla más que una obligación es una enorme responsabilidad , expresó el directivo que presumió que en seis años y medio de gestión ésta es la séptima serie por un campeonato que disputará Santos, y la sexta desde la inauguración del Territorio Santos Modelo, es decir, desde hace tres años y medio.

Irarragorri sabe que la actualidad del plantel que dirige Pedro Caixinha sería envidiable en cualquier otro club, con el equipo en cuarta posición de la Liga y a un paso del Mundial de Clubes, pero a pesar de ello no pierde la humildad y le da gran crédito a su afición.

No ha sido un camino sencillo el disputar dos torneos, y más con las distancias que la Concacaf exige y que siempre lo convierte en el algo complicado. Pero yo creo que la posibilidad de ganar el título nace por la misma esencia ganadora de los futbolistas, misma que nos transmite la afición, junto con el compromiso de todos, que queremos hacer las cosas con gran seriedad en ambos torneos .

Y es justo por ese respaldo incondicional de sus seguidores que el equipo lagunero existe la enorme necesidad de levantar la copa de la Concacaf, primero para darle una satisfacción a su gente, y después intentar poner en alto el nombre del área.

Tenemos pendiente esa tarea de poderle dar un campeonato internacional a nuestra gente y poder representar no solamente a México sino a toda Concacaf en el Mundial de Clubes , agregó.

Finalmente el Presidente de Santos descartó que a pesar de la cercanía territorial que hay con Monterrey, y de las finales que ha disputado ante ellos sus enfrentamientos puedan considerarse un Clásico.

carlos.herrera@eleconomista.mx

rgs

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