Lectura 4:00 min
Las vacaciones no son la solución al burnout: ¿Qué se necesita para reducir el estrés en mujeres líderes?
Los beneficios de las vacaciones para reducir el estrés laboral son pasajeros, se requieren iniciativas estructurales y organizaciones que permitan que las mujeres compaginen la vida laboral y personal.
A nivel mundial, el 62% de los colaboradores presenta síntomas de fatiga, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, el tener que dividir el tiempo entre el trabajo de cuidados y la vida laboral, genera que las mujeres vivan un agotamiento excesivo.
Asimismo, el estrés en las mujeres crece cuando llegan a puestos de liderazgo, debido al aumento de tareas, lo que puede desencadenar burnout laboral, que se refleja en una afectación al bienestar físico, emocional y laboral.
Tomar vacaciones pueden ser una alternativa para reducir el estrés crónico y fortalecer la resiliencia al burnout; sin embargo, un estudio publicado en la revista Journal of Occupational Health, encontró que a pesar de que las vacaciones pueden disminuir el agotamiento, los efectos positivos desaparecen rápidamente, al grado de desaparecer totalmente en un periodo de entre dos y cuatro semanas.
Esto significa que la clave para combatir el burnout no radica en sólo tomar vacaciones, sino en hacer un cambio profundo y estructural, tanto a nivel social, gubernamental como organizacional.
¿Cómo combatir el burnout de raíz?
En este sentido, el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD) de IPADE Business School realizó el estudio “resiliencia al burnout”, en el que encontró que existen dos factores claves para mitigar el burnout en las mujeres líderes: los estructurales y organizacionales.
Factores estructurales
Yvette Mucharraz y Cano, directora del CIMAD destaca que el sistema integral de cuidados, impulsado por políticas gubernamentales que garanticen servicios como guarderías, comedores escolares y horarios extendidos en las escuelas impulsarían la participación de las mujeres en puestos de alta dirección y ayudaría a combatir el estrés laboral.
También hace hincapié en la necesidad de flexibilidad la movilidad urbana, es decir, reducir el estrés relacionado con los traslados para facilitar la convivencia familiar.
Apoyos organizacionales
En cuanto a los apoyos organizaciones, la directiva se centra en cuatro puntos que podrían reducir el burnout. El primero es un esquema de trabajo de híbrido, seguido del aumento del nivel de ingresos, puesto que las familias con mayores ingresos presentan menores niveles de burnout.
El tercer punto es abrir mayores espacios para mujeres en puestos de liderazgo, debido que a mayor nivel jerárquico, mayor facilidad para manejar el estrés, especialmente cuando las actividades se distribuyen en el equipo de trabajo.
Finalmente, las organizaciones requieren apostar por fomentar la desconexión digital, es decir tener políticas que impulsen el respeto del tiempo fuera del trabajo.
La resiliencia al burnout requiere esfuerzos coordinados entre gobiernos, empresas y familias para crear un entorno que reduzca las presiones sociales y laborales que enfrentan los trabajadores”, agrega Yvette Mucharraz.
Necesario apostar por la desconexión efectiva
De acuerdo con la encuesta de CIMAD, que reunió la opinión de 704 madres en puestos de liderazgo, tomar vacaciones y desconectarse de la vida laboral puede ser clave para reducir el burnout en las mujeres líderes y servir de respiro para llegar al trabajo con ideas frescas una mejor actitud.
Pero tomar vacaciones va más allá de sólo pedir unos días de descanso, se requiere una desconexión efectiva, es decir, tener límites claros entre el trabajo y el tiempo personal. Aunque en una posición de liderazgo es difícil desprenderse del todo, sí es posible establecer reglas.
También es importante el apoyo de la familia, puesto que son el pilar del trabajador y si se reparten las tareas de cuidados con la pareja o se cuenta con una red de apoyo, se impulsa el bienestar emocional.
“Con base en los hallazgos se puede afirmar que se requieren apoyos estructurales, organizacionales y familiares para reducir los niveles de burnout de las mujeres en puestos de liderazgo, y generar así resiliencia al burnout. Asimismo, bajo escenarios de desastre o crisis, es conveniente que estos apoyos se reestablezcan a la brevedad posible o se implementen apoyos similares para disminuir los efectos del burnout y evitar que se vuelva crónico”, finaliza Yvette Mucharraz.