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Cifras de la Cofetel no cuadran en el apagón
El informe de avance del piloto del apagón en Tijuana revela que la Cofetel nunca tuvo la certeza para asegurar que la penetración de receptores cumplía con la meta de la política de TV digital.
Las cifras que manejó la Cofetel para llevar adelante el apagón analógico en Tijuana no resistieron una revisión y su cotejo con otras fuentes revela que hubo una manipulación aritmética para presentar la meta, aunque quedaron entre 180,000 y 200,000 personas sin acceso a señal de televisión.
Pese a las aseveraciones de la Cofetel sobre la penetración del programa para dotar de decodificadores a la población, previo al apagón analógico en la ciudad fronteriza, hasta 30% de los televisores analógicos habría quedado sin decodificador, aun cuando las empresas contratadas lo hubieran repartido a todos los hogares sin recursos para comprarlo.
En la primera semana de abril, una vez terminada la entrega de decodificadores, 21% de los hogares -la mayoría de estratos socioeconómicos bajos- no tenía capacidad para recibir la señal digital por falta del decodificador, de acuerdo con un sondeo levantado por la empresa BGC.
Esta información cobra relevancia ante el dato de que prácticamente toda la población de ese municipio (99%) afirmó que tiene el hábito de ver programas de televisión.
CON SU PROPIA LETRA
De hecho, el informe de avance del programa piloto del apagón analógico en Tijuana, elaborado por la propia Cofetel, muestra que el organismo nunca tuvo la certeza de los datos para asegurar que la penetración de receptores digitales cumplía con los objetivos de la política de Televisión Digital Terrestre.
Ninguna de las fuentes se considera suficiente para el cálculo de la penetración , establece el documento, obtenido mediante una solicitud de transparencia.
En el estudio de BGC, al menos 30% de los hogares tijuanenses posee televisores que no reciben señal digital o no cuentan con servicio de televisión restringida, y al 8 de abril, 21% de los hogares de esa ciudad no tenía el decodificador porque los encargados de darlo no habían pasado a los domicilios o, en menor medida, porque no estuvieron cuando pasaron a dejarlo.
Cabe destacar que de los hogares donde se entregó el convertidor, sólo en la tercera parte fue instalado por el técnico, en 46% de los casos lo instaló alguien de la familia y en 36% seguía sin instalarse en la primera semana de abril.
En esa ciudad, cada hogar en promedio tiene 1.5 televisores analógicos y casi un receptor de pantalla plana. En total, se entregaron 163,213 decodificadores, lo cual representó sólo un rango de 78-81% de avance, según las estimaciones de la Cofetel.
El pasado viernes, el pleno de la Cofetel determinó suspender la señal digital que comenzó a transmitirse el 28 de mayo y pidió restablecer la analógica hasta el 18 de julio, concluido el proceso electoral.
