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Candidatas, las promesas
Arrancó la competencia electoral que definirá quién relevará al actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Salvo que ocurra algo inesperado, la batalla se librará entre las dos candidatas: la de oposición, Xóchitl Gálvez y la oficial, Claudia Sheinbaum.
Aunque aparecerá en las boletas, Jorge Álvarez Maynez, prácticamente no tiene posibilidades de ganar.
Las dos candidatas representan dos alternativas completamente distintas.
Gálvez ofrece el cambio. Sheinbaum promete continuidad.
En el arranque de sus respectivas campañas, como siempre lo hacen todos los aspirantes a algún cargo popular, se enfocaron más en las promesas; en lo que harán, de triunfar y alcanzar la Presidencia de la República.
Lo que no dijeron, es cómo lo harán, lo cual es especialmente importante, por el escaso margen fiscal que heredarán del gobierno lopezobradorista.
Cualquiera de las dos que gane la Presidencia de la República, tendrá el mismo reto: la insuficiencia presupuestal.
En los últimos días de la semana pasada, justo en el inicio de las campañas presidenciales, la agencia calificadora Moody’s Investors Service advirtió que la maniobrabilidad del próximo gobierno probablemente estará limitada por una posición fiscal debilitada. Además, dependerá de la composición del Congreso.
En la misma semana, tres importantes e influyentes organismos de análisis económico: IMCO, México Cómo Vamos y México Evalúa, publicaron su preocupación sobre la situación fiscal del gobierno federal.
Apuntaron que el desempeño de las finanzas públicas en 2023 y lo previsto en el Paquete Económico 2024 no aseguran la estabilidad fiscal en el futuro, ni garantizan los derechos de los ciudadanos en el presente
Advirtieron que aunque la recaudación tributaria ha llegado a máximos históricos, no ha sido suficiente para compensar la reducción de los ingresos petroleros.
Como consecuencia, se han hecho recortes discrecionales a sectores vitales como la salud pública, la educación y la seguridad.
Con todo, no se ha podido limitar el endeudamiento creciente, el cual podría volverse insostenible en el mediano plazo.Adicionalmente, por primera vez el gasto federalizado –la bolsa de recursos que se transfiere a gobiernos locales– decrece conforme avanza el sexenio.
Básicamente advierten sobre la debilidad de las finanzas públicas y la falta de una fuente sustituta de ingresos, y sugieren al congreso que imponga límites y controles al gobierno para realizar condonaciones fiscales a Pemex y propone crear un Consejo Fiscal que evalúe la política fiscal y exija estudios de impacto presupuestal sobre las propuestas de políticas públicas.
Fundamentalmente, todos los análisis económicos independientes al gobierno señalan el escaso margen fiscal que heredará la próxima administración, la necesidad de realizar una reforma fiscal profunda, el elevado nivel de déficit previsto en el paquete económico y la deuda solicitada.
La condición de las finanzas públicas, representa hoy una bomba de tiempo, que si no se desactiva, en algún momento estallará.
Por más que el gobierno mexicano y sus voceros intentan mostrar casi como un “milagro económico”, la realidad es muy diferente.
En el inicio de las campañas, no se registra una clara referencia al complicado escenario de las finanzas públicas.Sí se escucharon en ambos casos, ofertas y promesas que buscan un efecto político electoral. Sheinbaum ofreció “cuidar el legado” de Lópezobrador concluir las obras y consolidar los programas sociales.Incluso ofreció elevar el salario mínimo 11% anualmente y que las mujeres de edades entre los 60 y 64 años reciban bimestralmente la mitad de la pensión que reciben actualmente los pensionados de más de 65 años de edad.
De las 100 propuestas que hizo (al estilo lopezobrador) 20 tienen que ver con la conectividad y el nearshoring: 8 nuevos trenes de pasajeros; duplicar la carga por las vías férreas; mejorar carreteras e infraestructura portuaria y aeroportuaria y hasta lanzar un satélite mexicano al espacio.
Gálvez prometió y hasta lo firmó con su sangre, no eliminar los programas sociales del actual gobierno.
Prometió reinstalar el Seguro Popular, mayor seguridad, transporte público, salud y una mega cárcel de alta seguridad.
Hasta ahora, ambas candidatas se escuchan y seguramente seguiremos escuchando ofertas. Todas tendrán costos importantes.
Seguramente, con el paso de los días y avancen las campañas, irán definiendo con mayor detalle lo que harán, en caso de alcanzar la primera magistratura de la República Mexicana.
Veremos de dónde obtendrán los recursos para cumplir lo que hoy prometen.
