Revisar las prioridades en salud del migrante: Una urgencia inaplazable

En el panorama actual de las políticas de salud pública en México, la situación de los migrantes ha adquirido una relevancia que no puede ni debe ser ignorada. La salud del migrante es un tema complejo y multifacético que requiere una atención específica y una revisión exhaustiva de las prioridades establecidas.

En este contexto, se hace evidente la necesidad de crear una estrategia dedicada dentro de la estructura de la Secretaría de Salud federal. Este enfoque propositivo no solo buscaría resaltar la urgencia del asunto, sino también proponer una solución estructural y sostenible. Esta unidad tendría la misión de coordinar esfuerzos entre diferentes sectores y niveles de gobierno y organizaciones de la sociedad civil para proporcionar una atención integral a los migrantes. A esto hay que poner en consideración la necesidad de:

Coordinación Multisectorial y Colaboración Internacional: Estableciendo alianzas estratégicas con organizaciones no gubernamentales, entidades internacionales y autoridades locales para asegurar un abordaje colaborativo e integral en la atención a la salud del migrante. Este tipo de colaboración permitiría intercambiar mejores prácticas y recursos, optimizando la atención, reduciendo duplicidades y maximizando la cobertura geográfica. La cooperación internacional no solo abriría la oportunidad de asignación óptima de recursos, sino también conocimientos y experiencias de otros contextos que podrían ser implementados.

Capacitación y Sensibilización del Personal de Salud: Implementar programas de capacitación continua para el personal de salud, enfocados en la atención a poblaciones migrantes, abordando no solo los aspectos clínicos, sino también las barreras culturales. Esto aseguraría una atención respetuosa y efectiva, alineada con las necesidades específicas de los migrantes. Además, la sensibilización del personal de salud respecto a las experiencias y traumas de los migrantes contribuiría a una mejor comprensión y empatía en la atención médica, la salud mental cobra una importancia que no podemos dejar de lado.

Monitoreo, Evaluación y Recolección de Datos: Desarrollar un sistema robusto de monitoreo y evaluación que permita recoger datos precisos sobre el estado de salud de los migrantes y la eficacia de las intervenciones implementadas. Esto facilitaría la toma de decisiones basadas en evidencia y la adaptación de políticas según las necesidades emergentes. Además, la recolección de datos demográficos y de salud permitiría una mejor planificación y respuesta a emergencias. Los datos recopilados podrían ser utilizados para identificar tendencias y desafíos específicos que enfrenten los migrantes, permitiendo ajustes rápidos y efectivos en las políticas de salud.

Promoción de la Salud y Educación para la Salud: Diseñar e implementar campañas de promoción de la salud específicamente dirigidas a la población migrante, asegurando que la información sea accesible y culturalmente relevante. La educación en salud debe incluir la prevención de enfermedades, la promoción de estilos de vida saludables y la orientación sobre el acceso a los servicios de salud disponibles. Es esencial que estas campañas utilicen diversos medios de comunicación y sean adaptadas a los distintos contextos culturales y lingüísticos de los migrantes.

Acceso a Servicios de Salud y Reducción de Barreras: Garantizar que los migrantes tengan acceso a los servicios de salud esenciales sin importar su estatus migratorio. Esto incluye la eliminación de barreras burocráticas, la provisión de servicios de traducción y la implementación de horarios de atención flexibles. Además, es fundamental promover la integración de los migrantes en el sistema de salud, asegurando que tengan acceso a programas de prevención, diagnóstico y tratamiento. La creación de centros de salud móviles y la colaboración con organizaciones comunitarias podría mejorar significativamente el acceso de los migrantes a los servicios de salud.

Es crucial recordar que la salud del migrante no es un tema aislado, sino que está intrínsecamente ligado a la salud pública del país. Las enfermedades no conocen fronteras, y garantizar la salud de los migrantes es garantizar la salud de toda la comunidad. Esta unidad tendría como misión principal no solo la promoción y prevención, sino también la recolección de datos precisos que permitan una planificación adecuada y una respuesta efectiva a las necesidades de esta población.

La revisión de las prioridades en materia de salud del migrante debe ser una acción inmediata y concreta. Es necesario llevar las buenas intenciones en políticas efectivas que reconozcan y protejan el derecho a la salud de todas las personas, independientemente de su situación migratoria. La creación de una unidad especializada en la Secretaría de Salud es un paso fundamental en esta dirección, garantizando que México avance hacia un sistema de salud inclusivo y equitativo.

Es relevante apuntar que en esta ocasión el análisis lo he enfocado en la situación de los migrantes que atraviesan por nuestro país en busca de llegar a la frontera norte; en otro ejercicio haré uno en relación a las oportunidades de desarrollo de trabajos para programas de atención de los migrantes mexicanos en otros países y mecanismos para que se garantice la cobertura de Seguridad Social a sus familias en nuestro país.

Para llevar a cabo esta misión, es indispensable contar con un marco legal y normativo que respalde y facilite la atención integral a los migrantes. La creación de protocolos específicos y la asignación de recursos financieros adecuados son elementos clave para el éxito de esta iniciativa. Además, la participación activa de la sociedad civil, de los propios migrantes y de las comunidades locales en el diseño y la implementación de las políticas de salud es fundamental para asegurar que las soluciones sean efectivas y sostenibles en el tiempo.

Hoy cierro con una frase que se atribuye a Ban Ki-moon: “La salud es un derecho humano fundamental, no un privilegio.”

*El autor cuenta con 25 años de experiencia en el sector de la salud en México y Latinoamérica, fue socio fundador de una consultoría enfocada en análisis de políticas públicas en salud, salud digital y sostenibilidad. Y actualmente se dedica a la gestión de asuntos corporativos en materia de salud para la industria farmacéutica.