Quedan unos meses a las sofoles

Llegaron a ser, junto con los bancos, una fuente importante de crédito para los diferentes sectores productivos del país. Pero a las sociedades financieras de objeto limitado (sofoles) les quedan poco menos de cuatro meses de existencia, como tales, dentro del sistema financiero mexicano.

La ley establece que el 19 de julio del 2013 quedarán sin efecto las autorizaciones que hubiera otorgado la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para la constitución y operación de las sofoles. En este tenor, éstas deben elegir entre migrar a otra figura como banco de nicho o sofipo reguladas y/o sofomes no reguladas o liquidarse.

Al cierre del 2012, según el reporte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), quedaban registradas únicamente 19 sofoles. Diez años antes, en diciembre del 2002, habían inscritas 33.

Las que aparecían en los registros de la CNBV como sofoles al cierre del año pasado eran: ING Hipotecaria, Patrimonio, BNP Paribas, Sociedad Financiera Agropecuaria, Corporación Financiera de Occidente, Finpatria, Agropecuaria Financiera, Consupago, Agrofinanciera del Noroeste, Financiera Educativa de México, Hipotecaria Independiente, Ficen, GMAC Mexicana, Agrofinanzas, Sociedad de Fomento a la Educación Superior, Corporativo Financiero Vimifos, HIR Pyme, Corporación Hipotecaria y Financiera Súmate.

Sin embargo, de todas éstas, la mayoría ya había emigrado o había anunciado su cambio a otra figura. Por ejemplo, Patrimonio ya se presenta como sofom; BNP Paribas adelantó que será sofom; Sociedad Financiera Agropecuaria había manifestado su intención de ser banco, aunque todavía no lo definía, lo mismo que Corporación Financiera de Occidente; mientras que Consupago ya es Consubanco.

En tanto, Finpatria ya se anuncia también como sofom; Agropecuaria Financiera indicó que también será sofom; GMAC Mexicana, se transformó también en sofom; mientras que Agrofinanzas es ya banco; HIR Pyme es sofom; Sociedad de Fomento a la Educación Superior es sofom; y Financiera Súmate se transformó en sofipo.

Las sofoles surgieron en 1993, pues fue un requisito para la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio con América del Norte, que México contara con figuras de intermediación financiera especializada, similares a las establecidas en los otros países miembros del acuerdo.

Son sociedades anónimas especializadas en el otorgamiento de crédito a una determinada actividad o sector. Para captar recursos, están facultadas para hacerlo a través de colocación de deuda en el mercado de valores y también por financiamiento bancario.

Están debidamente reguladas y supervisadas por las autoridades financieras. A mediados del 2000, las sofoles tuvieron un auge importante.

Sin embargo, a mediados del 2006, la autoridad determinó desregular el otorgamiento de crédito, por lo que, desde esa fecha, cualquier persona puede darlo sin necesidad de requerir autorización. En este marco, puso como límite el 19 de julio del 2013 para que se concrete la desaparición de las sofoles.

eduardo.juarez@eleconomista.mx