Flujo histórico de remesas a México refleja migración en tránsito y origen de intrarregional de envíos: Banco Mundial

El incremento histórico de los flujos de remesas hacia México tiene detrás el aumento del número de migrantes en tránsito que se están quedando en el país, ante el endurecimiento de los controles fronterizos que está aplicando Estados Unidos a la migración. Esta es la hipótesis que tiene el Banco Mundial ante el nuevo incremento de envíos de dólares observado el año pasado.

Al interior del reporte anual de “Migración y Desarrollo” divulgado por el Banco Mundial, detallaron que los migrantes en tránsito que están quedándose en México son fuente importante del aumento de las remesas al país.

“Los migrantes en tránsito de Cuba, Nicaragua y Venezuela están pasando por México y Guatemala camino a Estados Unidos y reciben fondos de sus familias fuera de México para cubrir sus gastos de manutención y otros”, detallaron.

Este fenómeno de migrantes en tránsito así como el incremento en el flujo de remesas que ha experimentado México se está presentando también en Egipto y Marruecos.

De acuerdo con el BM, los cruces fronterizos hacia Estados Unidos y Europa continúan por arriba de los observados antes de la pandemia pese a los controles fronterizos y las remesas siguen fluyendo debido a la gran cantidad de migrantes en tránsito varados en México y Guatemala

Refirieron que México recibió más de 37,000 solicitudes de asilo durante los tres primeros meses del 2023, según la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados. “A este ritmo, México tendrá el mayor número de solicitudes de asilo y se convertirá en el tercer país para solicitantes de asilo después de Estados Unidos y Alemania”, vaticinaron, lo que podría incentivar un nuevo incremento en el flujo de remesas.

En el comunicado que presentó al documento del BM, refirieron al director global de protección social y prácticas de trabajo en el organismo, Michal Rutkowski, para explicar que “las remesas complementan profundamente las transferencias gubernamentales en efectivo y son esenciales para los hogares receptores cuando la situación económica del país de origen lo amerita”.

Chiapas, un caso aparte

Los expertos del organismo apuntaron al caso de Chiapas y el incremento del flujo de remesas que experimentó entre el 2020 y el 2023.

“Chiapas es uno de los estados más pobres del sur de México y por ahí pasan los migrantes que cruzan desde Guatemala. Lo que indica que también hay flujos intrarregionales de remesas”, explicaron

Apoyándose en información del Banco de México destacaron que en el 2020, Chiapas captó 250.5 millones de dólares en remesas durante el primer trimestre de ese año. Para el mismo lapso de 2023, los envíos casi se triplicaron a 956.6 millones de dólares.

“Los migrantes se quedan más tiempo en México, lo que podría seguir incrementando las remesas al país (…) México sigue aceptando expulsiones por frontera terrestre de cuatro países: El Salvador, Guatemala, Honduras y más recientemente, Venezuela. Hace poco aceptó a 1,100 migrantes de Venezuela, Nicaragua, Haití y Cuba que fueron deportados después de la expiración del título 42”.

El Banco Mundial argumenta que el Instituto Nacional de Migración (INM) del país ordenó a “todas las oficinas de inmigración en todos los estados no otorgar formularios migratorios múltiples ni ningún otro documento que autorice el tránsito por el país.

Esto, más las medidas de Estados Unidos para evitar grandes flujos de migrantes, obligará a más desplazados a permanecer más tiempo en México, proyectaron.

Remitente: Estados Unidos

De acuerdo con el documento, la mayoría de los remitentes de remesas a esta región se encuentra en Estados Unidos, donde tanto los niveles de empleo como los salarios de los trabajadores hispanos nacidos en el extranjero han sido sólidos.

Detallaron que, cuando la moneda local de un país de origen se fortalece frente al dólar estadounidense, el valor de las remesas disminuye en consecuencia.

Tales efectos de valoración son significativos en el caso de los flujos de remesas, pues los emisores los toman en cuenta antes de hacer el envío.

Este fenómeno lo ha explicado el responsable de la Dirección de Estadísticas Económicas y el Foro de Remesas de América Latina del Centro de Estudios Monetarios de Latinoamérica, Jesús Cervantes González, en el caso de México.

Las remesas dirigidas hacia México son emitidas en dólares, pero se reciben y gastan en México en pesos.

Durante el 2020 y el 2021, este rendimiento en pesos mexicanos registró incrementos de doble dígito, favorecido por la fortaleza del dólar y la baja inflación. En el primer trimestre de 2022 se observó el último registro de doble dígito en el poder de compra de las remesas en pesos, que fue de 10.7% anual.

Pero esos recursos fueron disminuyendo en términos reales, en pesos mexicanos a partir del cuarto trimestre de 2022.

Banco Mundial es líder en trabajo analítico y operativo sobre la migración global.

ymorales@eleconomista.com.mx