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Pocos resultados con los acuerdos de productividad
El 60% de los acuerdos de productividad que se establecen en los contratos colectivos de trabajo entre empresas y sindicatos, carecen de formas de medición y metas, lo que da pauta a la simulación y resultados poco efectivos.
Así lo manifestó Enrique de la Garza, investigador de la Universidad Nacional Metropolitana, al participar en el Foro sobre La reforma Laboral que necesita México , en donde explicó que en los últimos 10 años en los que se han aplicado políticas explícitas de bonos de productividad no han sido eficientes.
La ineficiencia de los pactos, dijo en entrevista De la Garza, se confirma en el análisis, Convenios de Productividad, en el que destaca que de cada 100 acuerdos de productividad, 50 cumple a medias sus objetivos, la mayoría son para asistencia y puntualidad.
Datos de la Comisión de Salarios Mínimos revelan de las 511 negociaciones realizadas en octubre de 2010, en 63 de ellas se incorporaron o renovaron convenios para el otorgamiento de incentivos económicos por productividad, los cuales involucraron a 48,918 trabajadores.
El total de este tipo de acuerdos firmados en los diez meses transcurridos del presente año ascendió a 885 convenios, a través de los cuales se benefició a 444,636 trabajadores.
En el período enero-octubre del 2010, como resultado de las negociaciones colectivas, los trabajadores obtuvieron en promedio un incremento directo a su salario de 4.3%, en tanto, el bono de productividad es el concepto al que más se recurre en la negociación. Así, durante el lapso mencionado, se otorgó en promedio a ese bono un incremento de 6.6 por ciento.
Las ramas de actividad económica que presentaron los incrementos más altos en el bono de productividad fueron: el transporte marítimo (66.0%), servicios telefónicos (61.4%), hidrocarburos (23.5%) y la de otros servicios (20.9%).
"La mayoría de los convenios sólo consideran el desempeño general de la empresa y no miden el individual, grupal o departamental. Las metas más comunes se reducen a la asistencia y puntualidad", destaca De la Garza.
Asegura que la mayoría de los convenios de productividad no están dirigidos a elevar la eficiencia y los resultados de la organización, lo que tiene que analizarse, porque si la reforma laboral pretende enfocarse a la remuneración ligándolo a la productividad, debe considerarse que los últimos 10 años los resultados han sido decepcionantes .
"Abundan los pactos de productividad pasivos, que limitan la acción sindical a la mera aceptación de los proyectos empresariales a cambio de preservar ciertas condiciones de trabajo y en especial en la definición de incentivos por productividad. El sindicato no participa en el diseño ni en los indicadores de este tipo de convenios", destaca en el estudio de productividad elaborado por De la Garza para la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.