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Entidades no recibieron los montos programados en materia de participaciones

Especialistas consideran probable que en los datos del cierre del 2023 se vea que no se cumplieron con los recursos proyectados y se ubique como otro año en el que se ha tenido que acudir al FEIEF.

De los 32 estados que conforman el país, 26 no recibieron los montos programados en materia de participaciones por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

De acuerdo con el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, de enero a noviembre del 2023, la Federación debió asignarle a los estados 1.13 billones de pesos correspondientes a las participaciones calendarizadas, sin embargo, solamente pagó 1.06 billones, lo que significó un adeudo de 62,625.8 millones.

A partir de esta discrepancia entre lo presupuestado y lo asignado, se identificó cuáles son las 26 entidades afectadas por el desajuste: Aguascalientes, Baja California, Campeche, Coahuila, Colima, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.

Nivel de importancia

Para generarse una idea sobre el peso de la afectación y lo que implica para la población de cada estado, Diego Díaz Pérez, coordinador de Finanzas Públicas en Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), explicó que hay que tener como primer punto el nivel de importancia que tienen las participaciones para los estados.

Las participaciones, informó, son parte del gasto federalizado, y se trata de la asignación de recursos a las entidades según su contribución en la actividad económica y la recaudación, cuyo objetivo es incentivar el crecimiento y desarrollo económico. Son recursos que tienen como fin rubros como el de educación, salud, infraestructura social-obras públicas-, seguridad pública, hasta el sistema de pensiones.

Hay que tomar en cuenta que 80% del gasto de los ingresos de las entidades proviene del gobierno federal, y ahí destacan las participaciones. Por eso, cualquier variación en las participaciones, cualquier cambio con respecto a lo programado les va a afectar en términos de la planeación, se pueden cancelar proyectos, generar recortes”, señaló a El Economista en entrevista.

Para el investigador de Finanzas Locales del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), Emilio Sánchez Salazar, este resultado registrado obedece a las afectaciones que se han dado en la recaudación participable, sumado a que en el Paquete Económico del 2023 no se tomaron en cuenta los riesgos para los subnacionales por un bajo dinamismo en materia económica nacional, haciendo énfasis en la parte energética.

“Las participaciones dependen de una bolsa que se llama recaudación federal participable, que es una composición de ingresos petroleros y tributarios, aquí el problema y la razón por la cual se están viendo estos montos menores a lo que se calendariza es por la parte petrolera, porque en los criterios generales que se establecieron en el 2023 no se han cumplido con los montos proyectados de los ingresos petroleros”, subrayó.

Ajustes en política fiscal

Para el investigador del Imco, el 2023 será un año en el que se podrá ver que los estados tuvieron que acudir a tres comportamientos en específico: ajustes a su política de ingresos, modificaciones a la política de gasto, así como la renovación de la política de deuda.

Otro factor a considerar, ahondó el especialista del CIEP, es que desde la parte nacional están los fondos de compensación, como el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF).

“Cuando las participaciones están por debajo de lo aprobado, entonces, lo que pasa es que se activa este mecanismo del FEIEF y se le entrega a las entidades federativas el dinero que hace falta. El problema con este fondo es que para empezar ya viene rezagado por la pandemia porque se utilizó este fondo para poder subsanar las finanzas públicas”, subrayó.

Ante el panorama, Sánchez Salazar indicó que no solamente “es muy probable” que en el cierre del 2023 se vea que no se cumplieron con los montos programados en participaciones, también sería otro año en el que se ha tenido que acudir al FEIEF.

De hecho, uno de los riesgos que ve la calificadora Moody's para el 2024 y por la situación que viven los subnacionales actualmente, es que por primera vez en su historia se agoten los recursos del FEIEF.

Los más afectados

Entre los estados que presentaron las mayores variaciones negativas, al comparar los recursos pagados de las participaciones contra los proyectados en los tiempos calendarizados por la SHCP, en el lapso enero-noviembre, está Zacatecas como el de mayor rezago, con una brecha de 17.7%, se programó asignarle 15,099.9 millones de pesos y únicamente se le pagaron 12,430.8 millones, es decir, hay un adeudo de 2,669 millones.

En ese orden, siguió Guanajuato con 12%, estado del Bajío al se le programaron asignar 54,419.0 millones de pesos, pero únicamente recibió 47,863.1 millones; así como San Luis Potosí con 10.4%, que debió recibir 23,329.4 millones pero únicamente se le pagaron 20,905.5 millones.

estados@eleconomista.mx

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