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Descalifican a candidato de Ahmadinejad
La reacción ante las descalificaciones de dos candidatos presidenciales iraníes no se hizo esperar, al aumentar las tensiones en el ya dividido orden político del país.
Teherán. La reacción ante las descalificaciones de dos candidatos presidenciales iraníes no se hizo esperar, al aumentar las tensiones en el ya dividido orden político del país.
Ahora, sin estos dos aspirantes, los candidatos conservadores empezaron ayer su campaña oficial, libres de los retos que significan los candidatos más populares.
El expresidente Ali Akbar Hashemi Rafsanjani y el alto asesor del actual presidente Mahmoud Ahmadinejad, Esfandiar Rahim Mashaei, fueron descalificados el martes de las elecciones presidenciales por los 12 miembros del Consejo de Guardianes, que se encarga investigar los antecedentes de los candidatos.
Ahmadinejad llamó ayer a la decisión de descalificar a su principal asesor un acto de opresión y afirmó que llevaría el caso ante el líder supremo del país.
Sus comentarios fueron publicados en su página web, president.ir.
Aunque la seguridad en Teherán sigue siendo elevada, con la policía antidisturbios apostada en las plazas más importantes de toda la capital, hasta el momento no ha habido informes de disturbios. El volátil mercado de divisas de Irán respondió a la noticia con una caída de casi 3% ayer por la mañana. Y las redes de teléfonos celulares y la conexión a Internet se han interrumpido desde la noche del martes.
Las breves candidaturas de Rafsanjani y Mashaei tenían muchos paralelismos, pero sus salidas forzadas muestran las diferencias en cómo los dos se refieren a la estructura de poder en la República Islámica y un atisbo a su futuro.
Mohammad-Reza Sadeq, asesor de Rafsanjani, afirmó que el exprimer ministro sin duda, dará a conocer su opinión sobre la decisión del Consejo de Guardianes, pero su formación demuestra que siempre se ha movido en el marco de la ley y el interés nacional , un comentario que indica que es poco probable que Rafsanjani cuestione públicamente su descalificación.
Mashaei, que cuenta con el apoyo incondicional de Ahmadinejad, es menos probable que se vaya en silencio, lo que podría conducir a más hostilidad entre su equipo y el establishment conservador.