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Rehenes en Bélgica fue una farsa
El hombre, que enfrenta a dos años de prisión y una multa, dio la alerta por la mañana, al afirmar que "vio a cuatro personas con fusiles Kalashnikov tomando como rehén a su amigo".
La toma de un rehén, que implicó un importante despliegue policial este lunes en Gante, Bélgica, era finalmente una farsa, indicó la fiscalía de esta ciudad tras una agitada mañana.
Un hombre de 18 años, que residía irregularmente en Bélgica, fue detenido e interrogado por la fiscalía, que concluyó que no hubo ningún secuestro, informó la agencia Belga. Los servicios de policía ya conocían al joven por asuntos relacionados con estupefacientes.
El hombre, que enfrenta a dos años de prisión y a una multa, así como a un posible abono de los costos de la operación policial, dio la alerta por la mañana, al afirmar que "vio a cuatro personas con fusiles Kalashnikov tomando como rehén a su amigo".
A las 08:30 hrs., un hombre entró en la tienda. Dijo: Llamen a la policía, hay cuatro personas en mi apartamento, pusieron un revólver en mi cabeza y mi compañero está todavía allí, está dormido , explicó a los numerosos periodistas presentes Carine Malfait, quien tienen un negocio en los bajos del edificio. "Llamé a la policía", añadió.
La policía desplegó importantes efectivos e irrumpió a mediodía en el apartamento, donde en principio se encontraban los secuestradores y el rehén, tras acordonar todo el barrio.
Pero los 15 miembros de las fuerzas especiales de la policía no encontraron en el inmueble "ningún Kalashnikov, ni personas armadas", explicó una portavoz de la fiscalía de Gante Annemie Serlippens.
Y la "presunta víctima" niega haber sido tomada como rehén, añadió.
La portavoz explicó que los tres hombres, de cuya detención informaron los medios, no están acusados de nada. "Es gente que vive aquí y que nada tiene que ver con los hechos", precisó.
"No hay indicios de que esto tenga relación con el terrorismo, el Estado Islámico o con lo que pasa en este momento en Sídney", había indicado anteriormente Serlippens. Las autoridades intentan esclarecer si el hombre estaba drogado o bebido, cuando pidió ayuda, explicó la portavoz de la fiscalía.
La farsa tuvo lugar en plena toma de rehenes en Australia, que finalizó con tres muertos, entre ellos, el secuestrador.