En un duelo de poderosos, Nadal llega a la final

ACAPULCO. En un partido de poderosos, Nadal lo fue más. Saques a más de 200 kilómetros por hora, con un atlético Nicolás Almagro corriendo a las bolas imposibles y un rey de la arcilla como Rafael, se definió al último invitado para la final del Abierto Mexicano de Tenis. El chico de Mallorca buscará coronar este sábado su exitoso regreso a las pistas tras la Gira Latinoamericana.

Un duelo que inició el viernes y terminó el sábado a las 12:30 de la mañana. Y pensar que casi 21 horas después debe jugar la final ante David Ferrer. El ganador de la final de Acapulco además se coronará como el mejor de la Gira por el continente en 2013 ya que ambos tienen una corona conquistada: Nadal en Brasil y David en Argentina.

Al final Nadal ganó a Almagro en dos sets corridos 7-5 y 6-4, pero no fue nada sencillo. Hasta ahora en Acapulco nadie le había exigido tanto a Rafa, quien tras un duelo de saques portentosos y un juego para uno y otro para el otro, de a poco el número cinco del mundo impuso su jerarquía.

De los 22 juegos que se disputaron ayer el 50%, 11, se jugaron hasta el 40 iguales. Equilibrio de todas las fuerzas y más del 40% de todos los saques rebasaron los 200 kilómetros por hora siendo uno de Almagro el más veloz (203 km/h).

Rafael Nadal rompió dos veces el servicio de Nicolás y así se decantó todo a favor del jugador de Mallorca. El primero en el primer parcial cuando estaban empatados a cinco, luego en el siguiente lo cerró para el 7-5 definitivo.

Ya para el segundo set el quiebre llegó con el 4-4 en el tanteador, tras el rompimiento Nadal con su saque liquidó el partido que duró 1:48 horas.

Nicolás fue un gran oponente que perdió por los detalles, como cuando tenía en el segundo set para romperle en el séptimo juego a Nadal y con un 40-0 a su favor, se dejó alcanzar y superar, así ante un gigante de arcilla no hay mucho que hacer. "Si Rafa es el mejor arcillista de la historia, lo es por algo", dijo Almagro tras concluir el partido.

Rafael Nadal encabeza su propia resurrección tras más de 220 días inactivo por su lesión en su rodilla. Ha escogido Latinoamérica, la Gira que en 2005 lo lanzó al estrellato, para recuperar las sensaciones.

Por lo pronto la gran prueba será este sábado, ante David Ferrer, el cuatro del mundo y quien ha tenido una temporada pasada sensacional. La prueba ha llegado para Rafa, ¿hasta dónde se habrá recuperado?, ¿habrá regresado el poderoso Nadal? Ya lo veremos.

ivan.perez@eleconomista.mx