¡Con firmeza!: continúa la trayectoria positiva de los resultados bancarios

En términos generales, las instituciones financieras continúan mostrando solidez en sus resultados financieros, aprovechando las altas tasas de interés, una morosidad estable y un crecimiento en las carteras de crédito

La temporada de reportes está llegando a su fin, y con ello, la mayoría de las empresas han ofrecido una visión de su desempeño en el primer trimestre, así como una idea de lo que podemos esperar para el cierre de 2024.

El sector financiero ha captado la atención, con la mayoría de los principales bancos del país proyectando un panorama brillante para todo 2024, e incluso algunos vislumbrando un futuro igualmente prometedor para 2025.

Gentera comenzó con un sólido desempeño, con su margen financiero aumentando cerca del 20% con respecto al primer trimestre de 2023. A pesar de mantener gastos de administración elevados, la empresa explicó que esto se debe a la expansión de su fuerza laboral, destinada a impulsar los ingresos por colocación de créditos. Las provisiones aumentaron en un 23%, en línea con el crecimiento de la cartera de crédito total de Banco Compartamos, que experimentó un alza interanual del 29 por ciento.

Como resultado, la utilidad neta de Gentera creció de manera sólida en un 14%, alcanzando los P$1,508 millones, la segunda cifra más alta en su historia. Esto llevó a un retorno sobre el capital (ROE) del 19.09%, su nivel más alto desde mediados de 2017. A pesar del crecimiento, la cartera de crédito vigente aumentó un 21%, mientras que la cartera vencida creció un 20%, lo que resultó en un índice de morosidad del 3.56%, uno de los niveles más bajos en tiempos recientes.

El informe concluyó con el anuncio de un dividendo equivalente al 40% de la utilidad neta generada por la participación de Gentera en los resultados de 2023, lo que se traduce en un pago en efectivo de P$1.20 por acción.

Regional también destacó con perspectivas positivas, a pesar de una ligera contracción de 5 puntos base (p.b.) en su margen financiero en comparación con el año anterior. Durante el mismo periodo, sus ingresos no financieros aumentaron un 14%, impulsados principalmente por mayores comisiones netas y mayores ingresos por seguros y cambios.

A pesar de un modesto crecimiento del 4% en sus gastos de administración, muy por debajo del promedio del sector en nuestro país, la empresa logró un impresionante crecimiento del 36% en su utilidad neta de manera anual, junto con un ROE del 21.67%, el más alto de los últimos 5 años. Aunque su índice de morosidad aumentó marginalmente en 12 p.b., se mantuvo relativamente estable en un 1.35 por ciento.

Banco del Bajío también destacó con un sólido reporte. Su margen financiero aumentó un 6%, mientras que las estimaciones preventivas experimentaron un notable aumento del 88%, principalmente debido al crecimiento en las reservas de la cartera en etapa 1 y etapa 3.

Los gastos de venta aumentaron un 9%, impulsados por mayores costos salariales y beneficios para empleados. A pesar de estos desafíos, la utilidad neta del banco alcanzó los P$2,165 millones, con un aumento del 9% interanual. Esto condujo a un ROE del 27.29%, aunque este indicador ha estado disminuyendo secuencialmente desde el tercer trimestre de 2023.

La administración proporcionó una guía positiva, proyectando una utilidad neta entre P$10,500 y P$10,800 millones y un crecimiento de la cartera entre el 9 y 12 por ciento. Además, su índice de morosidad se mantuvo por debajo del máximo de los últimos 7 años, permaneciendo en un 1.34 por ciento.

Grupo Financiero Banorte destacó con crecimientos sólidos en varios aspectos clave, incluyendo su margen financiero, ingresos no financieros, utilidad neta, ROE y cartera de crédito.

Es notable que su ROE ha experimentado un crecimiento durante 11 trimestres consecutivos, marcando un período de sólido desempeño financiero. Además, su índice de morosidad se encuentra en uno de los niveles más bajos de los últimos 5 años, lo que refleja una gestión eficaz del riesgo crediticio.

En cuanto a su guía, la administración proyecta una utilidad neta que oscile entre los P$56,800 y P$58,200 millones, con un ROE entre 21 y 22 por ciento. Además, esperan un crecimiento conservador en la cartera, que se estima entre 10 y 12%, lo que sugiere una perspectiva positiva para el futuro cercano.

En términos generales, las instituciones financieras continúan mostrando solidez en sus resultados financieros, aprovechando las altas tasas de interés, una morosidad estable y un crecimiento en las carteras de crédito.

Un aspecto fundamental para entender esta situación es el enfoque de estas instituciones en mejorar su “mix” de activos, lo que las ha protegido en gran medida de posibles pérdidas durante el inicio del ciclo de recortes en la tasa de referencia por parte de Banco de México.

En realidad, se espera que la afectación sea marginal gracias a estas medidas de precaución y gestión proactiva del riesgo.