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Pemex: cuesta abajo en su rodada
Parece excesiva la acusación de que el factor clave de la reducción en la producción de hidrocarburos durante los últimos meses “sean los impagos de Pemex a sus proveedores”.
El reportaje periodístico del lunes aquí en El Economista (“Producción de crudo de Pemex alarga racha bajista”) resultó devastador. Al cierre del pasado abril, la producción de crudo por parte de la empresa estatal se ubicó en 1.5 miles de millones de barriles diarios, su nivel más bajo en los últimos 45 años. En términos anualizados, a ese mes dicho indicador mostró una reducción del 6.6% y en términos históricos un desplome tremendo de 1.7 a 1.5 millones de barriles diarios. En la nota consultada se dice, asimismo, que el indicador ha tenido 17 meses seguidos de contracción, tal vez en razón de que muchos proveedores han reducido sus servicios de apoyo a la entidad en razón de los retrasos en pagos pendientes.
Se explica en el reportaje que la administración que ya llega a su fin, encabezada por el agrónomo Octavio Romero, tomó la costumbre de también incluir en las cifras de producción de Pemex a los condensados que son hidrocarburos más flamables, pero con mayor valor unitario en el mercado. Sin embargo, en tiempos recientes también la producción de condensados se redujo visiblemente al bajar de su máximo hace un año (296.5 miles de barriles diarios) a 277.9 en marzo del presente año. En cifras agregadas, la producción de crudo más condensado se redujo de un máximo de 1.904 en abril de 2023 a 1.784 millones de barriles diarios al cierre del pasado abril.
De manera que podría suponerse inexorable, la contracción se traspaso al proceso de crudo en el sistema de seis refinerías con que cuenta la entidad (excluyendo Dos Bocas, que aún no refina un solo barril). Y en el mismo sentido, también las exportaciones de petrolíferos se han contraído de forma importante. Respecto al tema de refinación, según el reportaje citado la caída en abril con respecto al mes precedente fue de 10 por ciento. Y el nivel de exportaciones es el más reducido de los últimos 34 años con 681 miles de barriles diarios el pasado abril.
Parece excesiva la acusación de que el factor clave de la reducción en la producción de hidrocarburos durante los últimos meses, “sean los impagos de Pemex a sus proveedores”. ¿Los malvados proveedores saboteando la operación de la sacrosanta empresa, que es motivo de orgullo para todos los mexicanos? ¿Por qué no mejor cargarle también muchas culpas a la muy deficiente administración del agrónomo Romero Oropeza?
