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Shock eléctrico
Sobre advertencia no hay engaño.
El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió que no haría cambios constitucionales, hasta el tercer año de su gobierno.
En ese sentido ha sido congruente. No reformó la Constitución Política, para dar reversa a la Reforma Energética.
No obstante, por la vía de los hechos le ha propinado tremendos obuses a la ruta que siguió el gobierno previo.
Suspendió la apertura energética y la participación de la inversión privada en las industrias petrolera y eléctrica.
Lo que también ha dicho es que hará cambios constitucionales, si es necesario, para alcanzar sus propósitos en el sector energético.
Apenas está iniciando su tercer año de gobierno y todo indica que meterá el acelerador para alcanzar lo que sintetiza con la frase con la que autodefine su gobierno: la cuarta transformación.
A su abierto y claro deseo de “fortalecer” a Pemex y CFE, y el objetivo de trazar la ruta para volver a su condición monopólica -que hasta ahora ha buscado por la vía administrativa-, habrá que sumarle nuevas embestidas, por la vía legislativa.
Ayer, el Jefe del Ejecutivo, puso sobre la mesa una propuesta de reforma de la Ley de la Industria Eléctrica (LIE).Esta iniciativa tiene en la redacción de su argumentación, una enorme carga ideológica.
Pero lo que sí marca claramente es el objetivo de cerrar la puerta a la libre concurrencia, que marca la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. El objetivo de la iniciativa de reforma de la LIE, es violatorio de la propia Carta Magna, al buscar darle prioridad a la CFE, por sobre sus competidores privados.
Con esta iniciativa de ley, el gobierno lopezobradorista está buscando darle la vuelta a todo lo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha rechazado hasta ahora.
Lo más probable es que esta iniciativa de ley provoque un peligroso “corto circuito” con impacto internacional, porque va en contra de la iniciativa privada nacional y extranjera.
Le daría prioridad a CFE sobre sus competidores privados aunque lo que produce la empresa del estado es más caro y sucio en términos ambientales.Esto, además de afectar a las inversiones privadas locales y foráneas, impactará en los precios finales a los consumidores.
¿Por qué? Simple y sencillamente porque muchos productos hoy se fabrican con electricidad, generada por los privados, en sana competencia, mucho más barata y limpia que la de CFE.
O sea que la iniciativa para reformar la Ley de la Industria Eléctrica, busca volver al pasado monopólico e ineficiente, en detrimento de los consumidores que pagarán energía más cara y sucia.
Además, le generará al gobierno mexicano, el riesgo de enfrentar juicios internacionales.
De aprobarse esta iniciativa de ley, terminará por ahuyentar las inversiones privadas.
Se trata de otra iniciativa que cruza la línea roja de la falta de garantías a las inversiones y la certidumbre legal.
Ley Banxico, riesgo crediticio
El gobernador de Banxico, Alejandro Díaz de León, no ha cejado en su defensa de la autonomía del banco central.
Ayer en el inicio del Parlamento Abierto bicameral reiteró que la iniciativa que pretende modificar la Ley de Banxico puede poner en riesgo la calificación crediticia de México.
Aunque el presidente de México ha dicho últimamente que la iniciativa debe respetar la autonomía del instituto central, la leña de la hoguera en la que pretenden quemar la valiosa autonomía del Banco de México, sigue encendida.
Atisbos
Electo por unanimidad, Daniel Becker será el nuevo presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), para el periodo 2021-2023, en relevo de Luis Niño de Rivera.
Becker es presidente y director general de Grupo Financiero Mifel y tomará posesión de su cargo en la próxima Convención Bancaria, edición número 84, en marzo próximo.
La ABM informó ayer que Becker fue electo, en un proceso de votación en el que representantes de los 49 bancos asociados expresaron su opinión mediante voto directo y secreto.
Becker enfrentará tiempos difíciles por iniciativas que afectan al sector financiero.
