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Urge evidenciar en la ley el “grave” problema de las enfermedades cardiovasculares
“Como sociedades médicas afortunadamente estamos hermanadas... ( ) Queremos decirles a las autoridades y a los tomadores de decisiones, que pueden contar con nosotros como un grupo sólido, comprometido con estos proyectos más allá de intereses específicos”, Dr. Alcocer Gamba, ex presidente de la Sociedad Mexicana de Cardiología.
En México las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte, igual que en el resto del mundo. Al año se tienen más de 150,000 decesos, particularmente por infarto agudo al miocardio. A la par, en México hay una falta de cultura saludable y leyes que evidencien la gravedad del asunto. Por lo anterior en la Cámara de Diputados se discute cómo robustecer la Ley General de Salud en materia de cardiopatías.
El doctor Marco Antonio Alcocer Gamba, ex presidente de la Sociedad Mexicana de Cardiología, plantea el problema de forma general. “Todas las personas que mueren por infarto lo hacen en las primeras cuatro horas, es decir que este tiempo es trascendental, sin embargo, tenemos muchos contrastes en la atención. El problema es que no todos los pacientes tienen acceso a los tratamientos, a veces por simple desconocimiento, porque el paciente no acude al médico de forma inmediata, pero también en muchos casos por falta de infraestructura y planes de acción”.
¿Que necesitamos?, el especialista dijo a El Economista que activar la atención del paciente es la clave, para ello, acceder a tratamientos como cateterismo (para destapar la arteria que se tapó), o medicamentos que den tiempo para llegar a una sala de hemodinamia, deberían ser un básico en esta Ley.
También tener tecnología para “hacer redes' y que desde lugares periféricos se envíe a los grandes hospitales una alerta e información. Así un experto pueda estar asesorando a médicos que podrían ser pasantes, médicos generales e incluso enfermeras en lugares con poco acceso”.
Por otro lado, se requiere que la misma población pueda recibir sensibilización y salvar una vida a través de la reanimación cardiopulmonar con las manos, por ejemplo. Requerimos desfibriladores en lugares públicos como cines, estadios, restaurantes, “Es importante que la sociedad civil se involucre y tengamos espacios cardio protegidos con gente entrenada”.
Por último, dijo que requerimos de un análisis situacional, para, por ejemplo, buscar alianzas con hospitales privados, que tienen infraestructura sobre todo en los Estados, donde el servicio público no cuenta con las herramientas necesarias para este tipo de pacientes.
Para poder ser voz hay que estar sensibilizados
Lo que se tiene hoy en la Cámara de Diputados, es un dictamen y una iniciativa enviados desde el Senado; ahora lo que toca es generar el dictamen final que se espera pueda llevarse al pleno en este periodo legislativo para su aprobación y futura publicación como parte de la Ley General de Salud. Por ello, antes de generar este documento, se llevó a cabo el Foro legislativo “Atención a las cardiopatías: Prevención para salvar vidas”, encabezado por el diputado Emanuel Reyes Carmona, presidente de la Comisión de Salud, y al que diversas fuerzas políticas se sumaron.
En entrevista el diputado Éctor Jaime Ramírez Barba, secretario de la misma comisión, asegura que “lo más valioso de este foro fue ver a tanta gente, tan preparada, encabezando el tema, es una maravilla, porque no están peleando solo por ellos sino por un México con salud (...) Haberlos escuchado sirve para anexar al dictamen que ya se está elaborando”.
Con estos temas sobre la mesa, el diputado, recordó que los legisladores tienen dos funciones principales. La primera es ser voz en el Congreso “lo que ocurrió en el Foro -que es independiente del tránsito legislativo-, es reconocer que los legisladores necesitamos escuchar para poder ser voz. Hoy escuchamos a los expertos de siete asociaciones. Cuando tu ves participar a la sociedad civil, y se reconocen muchos más determinantes de la salud, los legisladores tenemos que aprender, entenderlo y traducirlo en Ley”.
El segundo deber parlamentario es generar leyes “en este caso nos encontramos con un proceso legislativo avanzado que busca en esencia el reconocimiento en la Ley de manera puntual de lo que es la salud cardiológica”.
Dijo que aunque las iniciativas aún presentan elementos que se tienen que trabajar para dar mayor certeza y claridad, sobre todo en el tema presupuestario, es un momento clave para poder aprobar, pues hay consenso. “Necesitamos que el tema esté en la Ley” y posteriormente ir abonando para que se generen acciones concretas, ya sea en el reglamento, o a través de la controversia constitucional, “para que se le vaya dando presupuesto, pues una garantía progresiva debe tener recursos, si no, nadie está obligado a lo imposible”.
Dijo que cada argumento brindado debe convertirse en política pública, por ejemplo, entender que la mayoría de las personas que mueren por estas causas lo hacen en sus casas o en la calle, tiene mucha lógica para empujar con fuerza el hecho de que existan desfibriladores en espacios públicos. También ver el tema desde el gasto per cápita en salud, hace que atender la salud cardiovascular se vuelva primordial. “En la política Pública debemos saber dónde se va a poner el recurso de manera muy específica”.
Que esto no quede en una reunión aislada
Alcocer Gamba coincide en que es un momento clave para empujar esta iniciativa, y aunque por ahora está en manos del legislativo, la comunidad alrededor de esta problemática está unida y dispuesta a apoyar. “Como sociedades médicas afortunadamente hoy estamos hermanadas (...) Queremos decirles a las autoridades y a los tomadores de decisiones, que pueden contar con nosotros como un grupo sólido, comprometido con estos proyectos más allá de intereses específicos”.
Dijo que “necesitamos que esto no se quede en una reunión aislada”. En esta reunión se trató de dar una lluvia de ideas en muchos temas que van de la mano con problemas del corazón, y que además como sociedades médicas se está promoviendo con mucha fuerza. “Podemos aprovechar los conocimientos científicos que se están publicando, para que se aterricen en proyectos de salud en nuestro país”.
Agregó que “el éxito es que haya grupos de trabajo específicos, con especialistas que estén desarrollando el cómo si, conjuntar las capacidades gubernamentales y ver cómo somos capaces de mejorar e ir actuando paulatinamente”.
Enfermedades relacionadas con padecimientos cardiovasculares:
Hipertensión (presión alta), que reduce 10 años la expectativa de vida de una persona y está relacionado con la mitad de las muertes cardiovasculares, esto es muy frecuente pues uno de cada cuatro adultos en México la padecen, es llamado el asesino silencioso, por no presentar síntomas en la mayoría de los casos.
Colesterol, el cual se tiene en cifras excesivas y va muy vinculado a los infartos.
Poca actividad física, el 80% de los adolescentes no hace ninguna.
Sedentarismo, que aumenta un 30% la muerte por problemas cardiovasculares.
Diabetes, dos terceras partes de estos pacientes mueren de enfermedad cardiovascular.
La obesidad infantil, con un impacto de casi 14 años de vida perdidos y un gasto de casi un 25% del presupuesto en salud.
Tabaquismo, asociado al 20% de las defunciones cardiovasculares en México y quita 10 años.
El Covid-19, aumentó las arritmias, coágulos, e infartos.