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Florida: finales con ingresos a medias
Tampa Bay perdió 400 millones de dólares en derrama económica por sus dos equipos finalistas en la NHL y MLB. Albergar el Super Bowl LV redimirá un porcentaje de las pérdidas.
En 2020, el estado de Florida tuvo a cuatro finalistas en cada una de las ligas más importantes de Norteamérica, además fue sede de las finales de la NBA y dos veces del Super Bowl (2020 y 2021), sin embargo, debido al nulo aforo de aficionados y la mudanza de las finales a burbujas en Canadá y Texas, la ciudad perdió cerca de 400 millones de dólares en derrama económica relacionada al deporte, de acuerdo a datos de Axios. El Super Bowl LV recuperará solo el 50% de las ganancias de una temporada normal.
En septiembre, Tampa Bay Lightning levantó la Stanley Cup de la NHL, sin embargo los partidos se llevaron a cabo en burbujas en Canadá, donde, según proyecciones del medio canadiense The Globe and Mail, unas 800 personas entre medios y staff de la liga generarían derrama económica en hoteles y restaurantes.
Las siguientes dos finales las disputaron los Tampa Bay Rays de la MLB y el Miami Heat de la NBA. Ambos cayeron contra los equipos angelinos en emocionantes finales, pero no fueron Miami, Tampa Bay ni Los Ángeles las ciudades que albergaron los juegos de sus equipos, sino que la NBA se reanudó en una burbuja en Orlando, donde en las finales solo se permitió el ingreso de un par de familiares de los jugadores, mientras que la Serie Mundial de la MLB se jugó en el Globe Life Field en Arlington, Texas.
Los Angeles Times indicó que los gerentes y propietarios de negocios que se han beneficiado de las franquicias deportivas angelinas estiman que los ingresos cayeron al menos en un 50% en comparación con los años anteriores. Por citar un ejemplo de los montos que una temporada convencional deja a una ciudad, un estudio de Conventions, Sports & Leisure International, recuperado por el medio Crains Cleveland, indicó que cada juego de finales de la NBA jugado en Cleveland en 2018 generó un impacto de 3.7 millones en la economía del noreste de Ohio.
Este fin de semana, los Buccaneers de Tampa Bay se convertirán en el primer equipo en hacer del Super Bowl un juego en casa cuando se enfrenten al vigente campeón, los Kansas City Chiefs, en un duelo que espera recibir a cerca de 22,000 aficionados (un tercio de la capacidad total del estadio Raymond James), además de permitirle a los comercios locales como bares y restaurantes la activación de su economía.
"Estamos subiendo al escenario mundial y una cosa que puedo garantizarles es que Tampa Bay va a bailar como nunca antes había bailado. Nos estamos asegurando de que este sea un evento seguro para todo el mundo", expresó la Alcaldesa de Tampa Bay, Jane Castor.
Star Tribune señaló que el Super Bowl del año pasado en el área de Miami generó un estimado de 572 millones en derrama económica en los tres principales condados del sur de Florida, según el comité anfitrión del juego, y este año el director del Instituto de Pronósticos Económicos de la Universidad de Florida Central pronosticó que la región de Tampa Bay probablemente no generará ni la mitad de eso.
De acuerdo a Tampa Bay Times, un boleto para el juego del 7 de febrero cuesta un mínimo de 8,550 dólares, sin embargo, ese precio requiere que se compren un paquete de cuatro boletos con un precio total de 34,200 antes del costo por servicio, lo que representa un costo total de 40,356 o 10,089 cada uno. Los precios alcanzan los 24,310 dólares por asiento.
Al mismo tiempo, una gran cantidad de bares, restaurantes y negocios están organizando watch parties, para que aquellos que no pudieron obtener boletos puedan ver el juego a través de las transmisiones de televisión. Estas contarán con medidas de protección sanitaria como el uso de cubrebocas siempre que no se esté ingiriendo alimentos y distanciamiento social.