No a la reforma laboral, un freno a la eficiencia

Cancelada la posibilidad de concretar los cambios a la Ley Federal del Trabajo, al menos en la LXI Legislatura, también se frena la oportunidad de avanzar en la eficiencia del mercado laboral como lo estipulaba la propuesta de modernización a los 1,010 artículos de la legislación laboral.

Aunque en el último reporte de Competitividad Global 2011-2012 del Foro Económico Mundial México pasó del lugar 120 al 114 en cuanto a la eficiencia del mercado laboral, lo cierto es que de los nueve pilares que lo conforman, en los temas fundamentales registró un retroceso.

Los cuatro pilares que cayeron fueron el índice de la rigidez laboral, que paso del lugar 104 al 108; prácticas de contratación y despido, del 120 al 123; costos de separación, del 81 al 85; y en participación de las mujeres en el mundo laboral, del 117 al 120. El reporte de competitividad sugiere la necesidad de realizar las reformas adicionales para hacer el mercado de trabajo más eficiente.

Según los análisis de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), en caso de que se hubiera aprobado la reforma laboral, México habría avanzado de 25 a 30 posiciones en eficiencia del mercado laboral y tres en el Índice Global de Competitividad.

El documento denominado Diagnóstico y Propuestas de la misma dependencia detalla que la regulación de la contratación y separación representaría pasar del sitio 102 al 96; mientras que los costos de separación significarían colocarnos en el 68 y no en el 81 y la vinculación del salario a la productividad estaría en el 72, lo que representa un avance de 27 lugares.

Sin embargo, eso no es posible si no se modifican las formas de contratación o la separación de los trabajadores, actualmente hay una rigidez y no permite esquemas distintos para que los patrones puedan contratar a más personal, ya sean jóvenes o mujeres , dijo en entrevista Gerardo de los Cobos, diputado del Partido Acción Nacional.

ENTORNO IMPIDE AVANZAR: PRI

En la Comisión de Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados, los trabajos de análisis de la reforma se han frenado, incluso, el diputado del PRI Armando Neyra, quien se encargaría de elaborar el predictamen, afirmó: La reforma laboral tendrá que seguir esperando mientras se resuelve el problema del desempleo y el poder adquisitivo de los trabajadores , incluso los problemas económicos mundiales, porque frenan la posibilidad de una reforma.

Por otra parte, Víctor Flores, vicepresidente del Congreso del Trabajo y diputado del PRI, aseguró:

El país busca una ley moderna, pragmática que responda a las necesidades del mercado... Y esa revisión lleva su tiempo, es mentira que con la reforma se solucionen los problemas de desempleo o de recuperación del poder adquisitivo .

En tanto, Pedro Borda, presidente de la Asociación Mexicana de Directores de Recursos Humanos, comentó: Ante el difícil entorno mundial que plantea nuevos retos a las organizaciones, al mercado del trabajo y al talento humano, es necesario facilitar a los jóvenes el acceso a las fuentes laborales, lo que implica vincular la educación a las condiciones del mercado, modernizando las leyes en la materia y aumentando la productividad mediante el impulso de nuevas habilidades .

LOS PROTAGONISTAS EN LA DISCUSIÓN

RUTA CRÍTICA

Pese a las significativas coincidencias que existen entre los proyectos de reforma laboral del PRI y del PAN (hay consenso en 57 puntos críticos), los legisladores han agotado todos los plazos rumbo a la cada vez más lejana posibilidad de aprobar dicha legislación: 45 días que marca el Reglamento de la Cámara de Diputados, 45 días más que tenían como exención, y por último 150 días más por una solicitud que se hizo a la Junta de Coordinación de Política del órgano legislativo.

El pasado seis de agosto debió estar listo el dictamen.

Javier Lozano Alarcón, secretario del Trabajo y Previsión Social.

Desde su llegada a la dependencia anunció que sería indispensable modificar la legislación por lo que se avocó a revisar todas las propuestas de la materia presentadas en el Congreso.

Tereso Medina, Comisión del Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados.

Priísta afiliado a la Confederación de Trabajadores de México encabezará los trabajos de dicha comisión integrada por 29 diputados, de los cuales 14 son del PRI, nueve del pan y cuatro del PRD.

Armando Neyra Chávez, sector obrero del PRI en la Cámara de Diputados.

Fue nombrado para presidir a la Subcomisión encargada de elaborar el predictamen de la Ley Federal del Trabajo, sin que hasta el momento haya tenido avances.

Francisco Hdz. Juárez, presidente de la Unión Nacional de Trabajadores.

Líder sindical de los Telefonistas de la República Mexicana en donde lleva más de 30 años al frente de la organización, actualmente es Diputado federal por el PRD.

Joaquín Gamboa Pascoe, presidente de la Confederación de Trabajadores de México.

La central obrera de mayor representación en el país tiene aproximadamente 2,233 contratos colectivos de trabajo y representa a 311 sindicatos con alrededor de 600,000 trabajadores.

Isaías González Cuevas, Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos.

Actualmente ocupa un escaño en la Cámara de Diputados por el PRI y preside la comisión especial denominada Análisis de Políticas de Creación de Nuevos Empleos.

Pedro Borda Hartmann, Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos.

Conformada por 900 firmas del sector. Inició una fuerte colaboración en la elaboración de foros para incorporar las demandas del mercado de trabajo y concretar la modernización en la legislación.

Francisco Rojas, coordinador parlamentario de PRI.

Fue el encargado de frenar la aprobación y cualquier negociación para aprobar la reforma laboral, aduciendo que debían pasar primero las elecciones en el Estado de México.

Gerardo Gutiérrez Candiani, presidente de la Coparmex.

Ha insistido en la necesidad de avanzar en la modernización del marco laboral, aceptando dejar de lado los aspectos vinculados con la transparencia sindical para avanzar en la negociación.

pmartinez@eleconomista.com.mx