México define ante la OIT acciones para enfrentar el cambio climático en el mundo del trabajo

Las nuevas estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) revelan que cada año al menos 2,400 millones de trabajadores están expuestos a un calor excesivo, es decir, más del 70% de todos los trabajadores. Si se comparan las estimaciones de exposición para 2020 con las de 2000, se observa un aumento del 34.7 por ciento.

Así lo reveló el organismo internacional en el encuentro “Cambio Climático y mundo del trabajo; Desafíos y perspectivas para la seguridad y salud en el trabajo en América Latina y el Caribe”, en donde México presentó las acciones que van encaminadas a atender estos nuevos desafíos.

Omar Nacib Estefan Fuente, director General de Previsión Social de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), informó que en el caso de México hay tres acciones normativas que desarrollan autoridades laborales para atender esta problemática y desarrollar un marco de protección ocupacional vigente y adecuado para las personas trabajadoras.

En ese sentido, expuso que a finales del año pasado, después de un proceso de casi un año y medio de diálogo social en los comités de normalización, se emitió una nueva regulación para la seguridad y salud en el sector agrícola que va entrar en vigor a inicios del 2025 y contempla distintas consideraciones para proteger a las personas trabajadoras del sector y en particular a las personas expuestas al cambio climático.

De tal manera que, detalló el funcionario, la NOM 003 para el sector agrícola establece un marco normativo bastante amplio de protección para las personas trabajadoras del sector agrícola, y está vinculada con otra regulación que también es relevante que es la NOM 015-2001 Temperaturas elevadas o abatidas, que justamente busca proteger a las personas trabajadoras.

Una tercera acción es la actualización de la Tabla de Enfermedades, “en México, desde hace 54 años no se actualizaban las tablas de enfermedades y a finales del año pasado esta actualización trae a las enfermedades del trabajo, a la clasificación internacional de enfermedades número 11 de la Organización Mundial de la Salud, lo cual es muy relevante porque tenemos un marco normativo vigente”.

Cabe señalar que la OIT, a través de Ana Virginia Moreira, de la Oficina Regional de la OIT para América Latina y el Caribe, comentó que para enfrentar esta situación y gestionar los riesgos laborales relacionados con el cambio climático, se necesitan:  respuestas legislativas; integrar medidas en las políticas relativas a seguridad y salud en el trabajo, medio ambiente y cambio climático;  desarrollar guías, directrices y protocolos más específicos y prácticos; Realizar campañas de sensibilización y ampliar la agenda de investigación para comprender mejor el impacto del cambio climático sobre los trabajadores y la interacción entre diferentes riesgos.