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Opinión

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Messi, el nuevo capítulo de Black Mirror, pero con un final parisino (qatarí)

Si la Torre Eiffel se pusiera a la venta todos voltearíamos hacia Qatar.

En la hermenéutica de la mercadotecnia Lionel Messi irrumpe en el equipo de futbol PSG para trabajar por y para la marca Qatar.

Desde la perspectiva del peatón, observamos al PSG como un club de la liga francesa de futbol con miras a ganar la Champions por primera vez en su historia. Error. No es un club, es el poder suave de un Estado llamado Qatar.

Qatar se despolitiza a través del futbol y se occidentaliza a través de París.

Chanel, Roche Bobis, Qatar, Hermès, y un interminable etcétera: la entronización de la publicidad francesa. El oligopolio del buen gusto (más un Estado en forma de balón de futbol).

¿Cómo convertir, o si se prefiere, cómo occidentalizar a un Estado árabe ubicado en el oeste de Asia, más pequeño que El Salvador, en una marca vinculada a París?

Messi ha protagonizado la telenovela del verano más dramática que se recuerde, al menos entre los culés, quienes pensábamos que Messi era propiedad del Barcelona o viceversa. Emociones infantilmente perpetuas, como debe ser ese mundo llamado futbol.

La salida de Messi del Barcelona podría ser el mejor capítulo de la serie distópica de televisión Black Mirror: ocurre durante la pandemia y con el club de futbol en estado de quiebra financiera. Demasiados golpes para un club de futbol en muy poco tiempo. Demasiados golpes para el segmento global de culés que se ha quedado huérfano.

Solo desde la ficción Messi pudo derramar lágrimas de tristeza en la tierra de las patatas bravas con alioli, y unas horas después, mostrar una sonrisa champan junto a su amigo Neymar en la capital de las marcas de lujo.

El mundo culé gozaba y al mismo tiempo temía de la messidependencia. La fantasía del Barcelona de Pep Guardiola no tiene ni tendrá referentes. La triada Messi-Xavi-Iniesta estaba vinculada a las fuerzas básicas del equipo donde se aprende a soñar. Messi se fue quedando solo. Arrastraba al barcelonismo porque el barcelonismo era Messi.

Pero todo sucedió con Black Mirror de fondo. El presidente Laporta prometió que frente a un asado convencería a Messi para renovar su contrato con el Barcelona. Solo desde la distopía se explica que fue Laporta quien finalmente no quiso renovar a Messi.

Solo desde la distopía se interpreta la batalla entre Messi frente a Bartomeu en el 2020; el presidente del Barcelona que pagó a una empresa de contenido de redes sociales para que criticara a Messi.

En liga española Sergio Ramos era antagonista de Messi, en la distópica historia del PSG serán soldados de la misma legión. Ramos ofreciendo su casa a Messi. “Quién nos lo iba a decir, ¿verdad?”, escribió en Twitter el defensa que no fue renovado por el Real Madrid al finalizar la temporada pasada y que, horas después de su adiós, apareció en París firmando un contrato para el PSG.

El jeque de Qatar Tamim Al-Thani es el creador de la historia PSG. Experimentó con Zlatan Ibrahimovic (2010) y David Beckham (2013) lo que hoy es una realidad con Neymar, Messi y Mbappé. Mientras que el Real Madrid, el Barcelona y la Juventus piensan en una super liga que les aporte más ganancias financieras, el PSG piensa en el Mundial de Qatar. Dos realidades que cohabitan en la cotidianidad, pero la brecha entre ambas es enorme.

Tamim Al-Thani y el presidente del PSG Nasser Al-Khelaifi tienen un sueño: ganar la Champions en el año del Mundial Qatar 2022.

Qatar utiliza su poder suave para ubicarse en Occidente, exactamente en el Parque de los Príncipes, sede del PSG.

El PSG es la selección global de futbol, es de Qatar; se trata de su brazo de poder suave. Ejemplo de diplomacia.

@faustopretelin

Fue profesor investigador en el departamento de Estudios Internacionales del ITAM, publicó el libro Referéndum Twitter y fue editor y colaborador en diversos periódicos como 24 Horas, El Universal, Milenio. Ha publicado en revistas como Foreign Affairs, Le Monde Diplomatique, Life&Style, Chilango y Revuelta. Actualmente es editor y columnista en El Economista.

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